El gobierno español ha anunciado un ambicioso plan de recuperación para la Comunidad Valenciana tras los devastadores efectos de las lluvias torrenciales que azotaron la región. Este plan, que contempla una inversión directa superior a los 10.600 millones de euros, busca cubrir los gastos de los ayuntamientos afectados y ofrecer ayudas a los ciudadanos que hayan perdido sus hogares, con un monto inicial de 20.000 euros por familia.
El presidente Pedro Sánchez presentó las medidas tras una jornada de caos en la que se registraron altercados, en especial en Paiporta, donde los reyes de España y los presidentes de las administraciones central y autonómica fueron increpados por la población. En este contexto, el presidente del gobierno detalló el alcance del plan, que incluye no solo la reparación de viviendas, sino también ayudas para pequeñas empresas y trabajadores autónomos. Se destinarán 838 millones de euros para apoyar a estos sectores y se habilitará una incapacidad temporal extraordinaria para aquellos afectados física o psicológicamente por la crisis, con el 75% de su salario garantizado desde el primer día.
Además, el gobierno español ofrecerá entre 20.000 y 60.000 euros para reparar viviendas dañadas, y hasta 10.300 euros para la reposición de muebles y electrodomésticos. A pesar del anuncio, Sánchez condicionó futuras ayudas a la aprobación de los presupuestos generales del Estado en el Congreso de los Diputados, una medida que enfrenta la oposición del Partido Popular (PP), que se ha negado a respaldarla.
En paralelo, el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, presentó su propio plan de recuperación, que incluye una ayuda directa de 6.000 euros a los afectados y un programa de inversión de más de 30.000 millones de euros, que necesitará el apoyo de la administración central para ser llevado a cabo.
Una buena noticia en medio del caos fue que, tras inspeccionar el estacionamiento del centro comercial Bonaire, donde se temía que hubiera víctimas mortales, las autoridades confirmaron que no se encontraron fallecidos. Este hallazgo contrasta con las primeras especulaciones sobre el desastre. No obstante, el impacto de los saqueos en la región ha sido notable, y las fuerzas de seguridad informaron que 15 de los 45 detenidos por pillaje han sido ingresados en prisión.
Finalmente, se espera que las aseguradoras desembolsen alrededor de 3.500 millones de euros para cubrir los daños materiales, lo que añade otra capa de complejidad al proceso de recuperación.
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