homopolíticus
- Mensaje de Palacio Nacional
Como coautor intelectual, Ulises Bravo reventó violentamente en 2018 dos mítines de la candidata Claudia Sheinbaum, en Coyoacán. Tras ganar la gubernatura de Morelos, su hermano uterino Cuauhtémoc Blanco negó al presidente electo López Obrador: «No digan que gané por ese señor […] Morena no me hizo ganar».
Los militantes duros y puros, tanto de la Marca MORENA como de la Marca AMLO, a partir de entonces, han visto como apestados políticos a los hermanos Bravo. En el claudismo mastican a Cuauhtémoc, pero no lo tragan. La sucesión de abusos del popular exfutbolista y actor cómico de Televisa son la coartada perfecta para el Quinazo que tanto necesita Sheinbaum. Un Cuauhtemazo vendría bien.
La anterior dirección nacional del partido color Pantone 1805 —con Mario Delgado, no así con Citlalli Hernández—, aparentó buena relación con Ulises, porque tenía bajo su control la Tesorería general del gobierno de Morelos. Así, cualquier operación electorerista resulta asequible.
Ni con la Tesorería estatal abierta ni con campañas negras contra Margarita González-Saravia, los ulisistas-cuauhtemistas pudieron hacer ganar a su candidata, la opositora Lucía Virginia Meza, con quien, de haber ganado la votación, no serían tocados ni con el pétalo de una carpeta de investigación y gozarían de impunidad. Hoy, la propia Meza utiliza otras palabras para decir que Blanco robó más, por lo que los diputados federales de Morelos —conmina— tendrían que votar su desafuero.
Además, todas las felonías que Cuauhtémoc Blanco perpetró en Morelos, las realizó bajo los acrónimos PSD y PES. Ya al final de sus tiempos se inscribió en MORENA, con admirable oportunismo y hasta pidió un banco cameral, donde lo tienen arraigado, con voto, pero sin voz, mientras el zar anticrimen Uriel Carmona tiene antojo de carnita tártara.
Para tejer la red de corrupción que tres años operó impune en Cuernavaca, el ídolo de Tepito presentó mica electoral, constancia de residencia y comprobante de domicilio ilegales. La Comisión de Hacienda a la Legislatura 54 [2018-2021] le arregló un faltante de al menos 200 millones de pesos y las revisiones a los gastos la realizó de forma tramposa, sin gratuidad. Lo primerio es cosa juzgada, lo segundo no.
letraschiquitas
Con 1.6 millones de suscriptores a su canal de yutub y casi medio millón de seguidores en equis, la periodista Juncal Solano señala de corruptos —«Se robó unos terrenos»— a Ulises Bravo, el gobernador de facto, y a Cuauhtémoc Blanco, el gobernador de jure, inicialmente enumerando 40 millones de pesos de un desfalco que, debe quedar claro, es una primera parte de la investigación global que contempla sólo recursos estatales, no federales. En el video periodístico aparece el Tricampeón bailando con un hombre, el mismo día que, en un comportamiento casi humano, golpeó los cristales del palco de transmisión de TUDN en la final de la Liga MX, donde humilló con una grosería fálica a David Faitelson y Ricardo Lavolpe. ¿Cuál es el mensaje? La también abogada es cercanísima a las grandes decisiones de Palacio Nacional…