NO PASA….NADA
Por: Jesús Solano Lira
En Sinaloa, se vive un estado fallido, por la indolencia, incompetencia y falta de sensibilidad del gobernador Rubén Rocha Moya, quien se afana por ser una copia burda de Andrés Manuel López Obrador. Para Rocha Moya NO PASA….NADA en ese estado, estado dolido, indignado y harto de la ola de violencia en la entidad. La confrontación entre la mayiza y la chapiza tiene a los sinaloenses en la incertidumbre, el miedo, el coraje y la indignación por las muertes colaterales que ha dejado esa lucha fratricida de las facciones del cártel de Sinalo, cuyos sicarios sin piedad, asesinan lo mismo a hombres, mujeres y niños.
El caso de los menores asesinados Gael y Alexander, de 9 y 12 años respectivamente, así como de su padre, prendió la mecha de una población cansada de tanta violencia. Ayer, la sociedad civil salió a las calles, fueron cientos, los que marcharon por las principales avenidas de Culiacán, exigiendo justicia y la renuncia del gobernador, que un día sí y el otro también, asegura que el estado está tranquilo y se ha contenido la violencia.
Ni la presencia de miles de soldados y cientos de elementos de las fuerzas especiales, ni de la Marina, ni de la Guardia Nacional, vaya ni la intervención directa del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfutch han contenido la ola de violencia en Sinaloa.
Desde que empezó la confrontación entre la mayiza y la chapiza, no han parado los asesinatos todos los días, el robo de vehículos, los atentados a establecimientos comerciales y en plena luz del día, ataques con explosivos, así como levantones y extorsiones. Con globos blancos, y vestimenta del mismo color miles de sinaloenses se fueron sumando a la marcha. Llevaban mantas con la leyenda “con los niños no” y “fuera Rocha”… Fueron cientos padres de familia y profesores que coincidieron en que “les pegaron dónde más les duele, los niños y les duele mucho por el asesinato de Gael y Alexander”.
Y que impotencia y que coraje escuchar el testimonio de Eduardo, un menor de 10 años que era amigo de los niños asesinados: “El gobierno no hace nada, todos se quedan sentados. No podemos salir, nos da miedo”, uffff neta, hasta el más fuerte se dobla por el sentir de una infancia que vive atemorizada por las constantes balaceras en Culiacán. La marcha llegó hasta Palacio de Gobierno.
No hubo quien los contuviera, entraron por la fuerza al inmueble en el que despacha un gobernador al que le quedo grande la silla. Hicieron pintas y llegaron hasta su despacho. Su frustracion, impotencia y enoja estalló y destrozaron lo que a su paso encontraron.
La exigencia generalizada: “Qué renuncie el gobernador por incompetente”. Y vaya joya de declaración, y que nivel del secretario de Seguridad de Sinaloa, Oscar Rentería, quien aseguró que el asesinato de 2 niños y su papá en un intento de asalto, fue porque el vehículo en el que viajaban tiene vidrios polarizados.
Ahora, como una medida paliativa, el gobierno de Sinaloa anunció que va a prohíbir el uso de vehículos polarizados, para evitar más asesinatos de personas inocentes.
No la chiflen que es cantada. Y que decir de la dirigente nacional de Morena, Luisa María Alcalde, quien refrendo su apoyo total al gobernador de Sinaloa, es más, presumió que Rubén Rocha Moya cuenta también con el apoyo de la federación. La pregunta es ¿por qué tanto apapacho al mandatario de la entidad?.