El brunch dominical se les atoró a muchos, tras leer las declaraciones del ex Presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva. Por más sorbos que daban a sus mimosas –champagne con jugo de naranja–, el salmón ahumado no bajaba.
“México fue presentado como la gran novedad del siglo 21 y que estaba mejor que Brasil (…) Pero me fui a enterar y todo es peor que en Brasil. No hay ningún indicador comparable a los nuestros… Quiero que México crezca, pero era mentira…”.
Y sobre la reforma energética: “Lo que hacen mejor, nosotros ya lo hicimos con Petrobras hace 20 años”.
Descalificó Lula al régimen de Peña Nieto –lo que muchos mexicanos hacemos ya aquí– y, en otras palabras, invalidó tajantemente lo que se pretende hacer en materia petrolera, adjetivándola cómo retrasada, arcaica y confusa.
Ya respondió en Madrid el propio Peña Nieto –no hay “competencia entre las dos naciones”–, pero ante el emabte la escuela diplomática itamita, con José Antonio Meade a la cabeza, tendrá que enfocar sus baterías de una manera diferente,
México no puede hacer una reclamación internacional a Brasil –aunque Lula anuncie que va a pelear por la reelección de Dilma Rousseff–, ya que se trata de un ciudadano común.
Pero sí puede –y debe—actuar contra quien mandó a declarar al brasileño: el propietario del Grupo Carso.
Y ya verá usted, se avecina una tormenta ¡peor que Ingrid!
SIN NEGOCIACIÓN
Proverbialmente, el subsecretario de asuntos políticos de Gobernación ha sido la instancia negociadora del régimen. Las grandes conciliaciones, arreglos, acuerdos, pactos entre las fuerzas políticas que actúan en la arena mexicana, pasan necesariamente por las hábiles manos del operador-negociador, por excelencia, de lo aparentemente irresoluble.
Todos los datos de inteligencia, de análisis, de investigación de Gobernación se ponen al servicio del subsecretario del ramo, con una maleta pródiga, abundante en $orpresa$ y prebenda$ de intercambio. Siempre ha tenido todas las fichas, porque es esa barrera que si es franqueada, deja en la indefensión al régimen completito.
Sin embargo, todas esas atribuciones le quedan muy grandes a Luis Miranda Nava, el actual operador de esa importantísima instancia. Hoy, el secretario Miguel Ángel Osorio Chong lo tiene relegado a tareas menores, insustanciales, como saber si los maestros de la CNTE van a poner sus campamentos y de qué medidas, en dónde; vigilar si las vallas metálicas de Bucareli o de Abraham González resistirán los jalones de los campiranos o de los perredistas de cualquier rumbo de la ciudad; atender a tal o cuál grupo que quiere audiencia con el Secretario…
Estas tareas, propias de un jefe de Departamento o de un subdirector de área, no son para quien ya desempeño funciones de Gobernador en Atlacomulcoland y llegó acá al Rancho Grande con una estela de “cercano”; tampoco para quien presume jugar dominó en Los Pinos con puro grandote; menos para quien creen que va a ayudarle a Aurelio Nuño a recuperar el DF para el PRI.
En todo caso, ¡qué despropósito! Porque lo único que salva a Miranda, dicen, es que vive en un departamento –el antiguo bar de Calderón–, construido específicamente para él en Los Pinos.
¿Será?
GOLIZA DE “EL BASURITAS”
Y mire usted lo que pasa cuando el gobierno federal –¡todo!– se lanza contra un individuo, en este caso “El Basuritas”.
El caso l ha dado la vuelta al mundo occidental. También el ridículo que ha hecho el equipo político guión jurídico de EPN, el que, después de dos meses y medio,180 declaraciones ministeriales, escándalos mediáticos radiofónicos de conocidas lideresas y heroínas de opinión, amenazas del gobierno federal, estulticias de la insoportable Rosy Orozco, ultimátum de pleito ranchero del líder indiscutible del PRI, chantajes de todo tipo a personal secretarial de muchas dependencias, etc. nohan logrado un solo indicio que inculpe a “El Basuritas”, quien hoy se alza triunfante sobre todo el equipo gubernamental, incluyendo a los abogados de Los Pinos.
Hasta el líder del PRI tuvo que echarse “un holandés de espalda” para blindar su seguridad, contratando un hercúleo grupo de fornidos muchachos, atentos y solícitos, enfundados en finos tacuches, a cualquier gesto o indicación del mexiquense, ex secre particular de Emilio Chuayffet.
El titular de PGR, el sub y el secre de Gobernación, el jefe de Gobierno y el procu del DF y el presi del CEN del PRI han mostrado a puro riñón que merecen los calificativos que les endilga la prensa extranjera.
No es posible que, aunque sea de mentiritas, no puedan formar una acusación penal, del tipo que sea, contra un desvalijado intelectual que deberá ser exonerado, antes de que provoque una crisis de gabinete y, obviamente,e l enésimo fracaso del tricolor en el DF y zonas metropolitanas, hasta donde llega el impacto de esta zacapela jurídica, política, social y moral (porque desmoraliza hasta al que traiga sudada la camiseta)
Índice Político: Las balaceras y heridos en el Paseo de la Reforma (antiguo Paseo de la Emperatriz), las sarracinas de sangre en GAM, los secuestros múltiples y encajueladas de Narvarte, los salteadores de chalequito amarillo que buscan en las esquinas previamente diseñadas a qué automovilista asaltar, la voracidad de las grúas de Marcelo Ebrard & family están logrando que la muy noble y leal –jejeje– Ciudad de México esté considerada entre las invivibles del planeta. El momento mexicano jamás pasará por aquí. Se requiere un ambiente mínimo de habitabilidad y convivencia, antes de pensar en el capital extranjero que, si viene, será utilizando a los testaferros de siempre, para no pararse por aquí. Vean el caso colombiano, venezolano, ecuatoriano,etc. Paren esto. Lleguen ya a un acuerdo de montos y tonelaje con las bandas, como en el pasado reciente. Aún estamos a tiempo de que todo México, que ya es territorio ITAM, no sea territorio apache.
bueno no se porque se encabritan tanto, Lula solo esta diciendo la realidad que la gran mayoria que (no los politicos y potentados) vivimos
realidad que ninguno de ellos quiere ver es decir todo se repite vivimos en peñanilandia