Patético. El gran disparate del populismo. Arribó a la Oficina Oval por el intrincado sistema electoral que rige en Estados Unidos desde los comicios posteriores a la presidencia de Abraham Lincoln-votación indirecta, sin descontar, el racismo contenido por menos de la mitad de los electores.
Sí, el pueblo norteamericano es discriminatorio en esa minoría, a pesar de sus baños de pureza disque de hipócrita amplia tolerancia. La geografía lo canta a voces. Basta ir al sur para observar el repelús de terceras generaciones de migrantes blancos que desdeñan a las personas por el tono de la tez. Y dispensan a los acaudalados sin cuestionar el origen moreno. Don dinero aplaca cualquier desviación al sentir interior.
Hoy se le investiga-a Trump por obstrucción de justicia- por la presunta injerencia de Rusia en las elecciones, caso Comey ex director del FBI, más las relaciones de colaboradores cercanos en temas diversos con las huestes del influyente mandatario ruso. Estadista de colmillos retorcidos, guste o no a sus adversarios. Un tema mayor que lo podría llevar a la destitución. (Ahí está la intromisión del ex asesor de Seguridad Nacional Michael Flynn, quien cayó en desgracia, sin la red de contención de su corrupto jefe, antes de 30 días en el puesto. ¡Claro! A contener el escandalo a todas luces.
En esta columna lo hemos revisado en dos ocasiones anteriores, cuando la indagatoria era prematura.
Hoy, la comisión que revisa el Rusiagate, al mando del intachable, Robert Mueller III, abrió el abanico para intensificar los lazos de sus allegados, incluido su yerno Jared Kushner-secretario sin cartera de todo-, con los cercanos a Putin.
La “eminencia gris” de origen demócrata (vaya paradoja) se balancea al abismo, la absurda lealtad al suegro de repente desfavoreció a la fortuna. Difícil creer, sin menospreciar su inteligencia natural más sus calificaciones académicas sea capaz de encarar problemas clave en tan diversos temas para el país, como el acuerdo sobre la venta de armas a Arabia Saudita; las relaciones con China, Israel, Canadá y México, además la reforma del Departamento de Asuntos de los Veteranos o la lucha contra la adicción a opiáceos. Y, los que se acumulen de acuerdo a la chispa del día del patrón en la Oficina Oval.
¡Vaya capacidad de aprendizaje! Con simples bullets y el expediente sobre el asunto se convierte en experto negociador. ¡Uf!…
Asusta la ignorancia rampante de Trump, un hombre de segunda que lo rubio o anaranjado no avala la inconsistencia ni el odio a quienes no comparten la dermis de su piel. Digerir el abuso al poder a diestra y siniestra resulta para el más sensato imposible. Además, a enfrentar el precipicio del recule del mandatario. Ni los mentirosos, ni los trepadores están a salvo de la profunda insensatez del millonario inmobiliario.
Un caso peligrosísimo, no solo para EU, sino para el resto del mundo. Mecha corta, desperdigado, incongruente, sin agenda estructurada, excepto las promesas de campaña las cuales tiro por viaje las rechaza el Poder Judicial o los suyos del partido republicano.
Y otras, como el DACA las desanda. “(Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, en inglés: Deferred Action for Childhood Arrivals). Decisión migratoria del gobierno de Estados Unidos con el fin de beneficiar a ciertos migrantes no documentados que llegaron como niños a Estados Unidos y que cuentan con cierto nivel educativo, en particular a los denominados Dreamers”.
El 45º presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió colgar el cuadro de Andrew Jackson, el séptimo presidente, en la Oficina Oval.
¿Por qué? Cual persona iletrada se propone, asociarse, a un heredero político del primer presidente populista de la nación. (Lo cual no es cierto, Jackson fue cuerdo, duro, con pantalones, sobretodo congruente a su tiempo)
“Jackson enfrentó a la amenaza de secesión de Carolina del sur por la ley de “Tarifa de Abominaciones, ley que había sido aprobada por la administración de Adams (1824).
Varios sucesores inmediatos negaron el derecho de secederse de la Unión y el derecho de nulificar una ley federal. La crisis de nulificación se calmó cuando la ley fue cambiada y Jackson amenazó a Carolina del Sur con una acción militar si el estado (o cualquier otro estado) intentara secederse”.
La analogía es trágica, absurda. Ojala a Trump no se le ocurra leer este pasaje histórico. Iluso este escribano a lo lea, incluso algún pasquín. Capaz, envía tropas a California para contener el incipiente Calexit (Separación del estado, de la Unión). Que por cierto, pondría a temblar a la economía estadounidense. Por sí misma, es una de las siete potencias económicas mundiales.
Desde Reagan-otro de alguna manera popular, no populista- a hoy, quien más envió órdenes ejecutivas en solo 100 días. Es él. Trump. ¿Porqué?… La inconexa necesidad a empoderarse a una posición inmerecida.
La investigación en curso de Mueller III va abriendo a otras instancias, como la NSA, la agencia de seguridad nacional, donde todo va confirmando los lazos rusos y la obstrucción de justicia.
Al cretino inquilino de la Casa Blanca, le quedan dos caminos; ir a la cárcel cuando menos por cinco años en compañía de determinados colaboradores, incluido su yernito, o, tranzar al estilo Nixon y renunciar, para solicitar el perdón del próximo presidente, en este caso, el vicepresidente Pence.
No sorprende que tanto Trump como el vicepresidente contrataron a abogados en caso se ofrezca.
Al tiempo…