• Exigen lo que ellos no hicieron
• Su saldo: 12 años de infortunios
El panista Luis Alberto Villarreal y sus huestes en la Cámara de Diputados, cuando debían de estar ocupados en que su partido no termine de despeñarse por la perversidad de Felipe Calderón, ahora le exigen al gobierno priísta explicaciones sobre las medidas económicas “que impactaron negativamente en los ciudadanos, como la desaceleración económica, el aumento inflacionario y la caída de 20 por ciento directo de la inversión extranjera, entre otros.”
“Estos indicadores se suman a las cifras que ha venido señalando constantemente Acción Nacional, y que demuestran que la actual administración no está siendo responsable con el manejo de la economía de México, por lo que es necesaria una explicación”, dijo lirondo Villarreal.
No tienen vergüenza los panistas. O tienen memoria de pollito. Seis meses ha que, como lo hizo Vicente Fox con el PRI, Felipe Calderón fue “sacado a patadas” de Los Pinos, y los diputados “panuchos”, como ellos mismos acostumbran calificarse, ya olvidaron el desmadre en que dejaron al país.
Dos sexenios panistas sin crecimiento y sin empleo. No recuerdan los señores diputados comandados por Villarreal que, en el 2000, el primer gobierno de la “alternancia” recibió una economía que crecía al 6%, en un marco de estabilidad macroeconómica, y ellos sacrificaron a la gente trabajadora, a los micro, pequeños y medianos empresarios, por mantener exclusivamente la estabilidad para los millonarios.
La estabilidad de la macroeconomía es necesaria para el buen desempeño de la economía real, pero los gobiernos panistas la adoptaron como su único objetivo y le dieron sacrificaron el crecimiento del producto interno bruto, desalentaron la inversión privada, principalmente la de las MiPyMes, que generan el 90 por ciento del empleo total, e hicieron trizas al sector formal de la economía, creador de puestos de trabajo.
¿Ya olvidaron que, de acuerdo con el propio INEGI panista, la tasa de crecimiento de la economía la dejaron en menos del 1.7 por ciento anual promedio, cuando la población crece 1.4, lo que mantuvo estancado el producto por habitante? Deterioraron la calidad de vida de millones de trabajadores y aumentaron la pobreza. Y sólo concentraron aún más la riqueza en muy pocas manos.
Durante los dos sexenios panistas, la pobreza aumento en 6.000,000 de personas. Tan sólo el 2010 el número se incrementó en 4.000,000. Ahora somos como 60 o 70 millones de pobres. Aparte de que no se generaron nuevos empleos, empujaron a los trabajadores mal empleados, con salarios injustos, a refugiarse en la economía informal, que rebasó los 25.000,000 de personas sin seguridad social, sin prestaciones, sin futuro.
Y los números negros del desempeño panista no fueron resultado de que no tuvieran presupuesto. Del año 2000 para acá, se han producido los ingresos públicos más cuantiosos de la historia, el 60 por ciento de los cuales provino de la exportación de petróleo. Y el presupuesto federal casi se les triplicó. Al tiempo que se hincharon de recursos financieros, nunca pudieron resolver los gravísimos problemas del país.
Despilfarraron, robaron. En vez de destinar a la inversión en infraestructura – caminos, puertos, aeropuertos, presas, refinerías, escuelas, hospitales -, usaron el dinero para aumentar desmedidamente el gasto corriente improductivo, generando una enorme camada de más ricos de lo que ya eran – y hay infinidad de casos -, o lo destinaron a programas asistencialistas inútiles, si no es que para comprar conciencias y votos.
La historia del despilfarro, de la corrupción, del abandono de los grandes problemas nacionales es interminable. Este espacio no da para tanto. Pero los datos duros presentados serían suficientes para que los diputados panistas mejor cerraran la boca, y cuidaran la cola, que la tienen muy larga. Recordar que en boca cerrada no entran las moscas.
fgomezmaza@analisisafondo.com
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