Redacción MX Político.- A pesar de que continuará el juicio en contra de Emilio Lozoya Austin por el caso de corrupción de Odebrecht, la Fiscalía General de la República (FGR) se vio envuelta en apuros despues de que la defensa del exfuncionario lograra que se desechara las pruebas financieras sobre él.
Esto se dio durante la audiencia intermedia celebrada el viernes durante la tarde en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte de la Ciudad de México, en donde la FGR pudo formular la acusación en contra del exfuncionario de Enrique Peña Nieto, y de su madre Gilda Margarita Austin después de un año de espera.
Tras un intenso debate de cerca de seis horas, la FGR presentó algunas de las pruebas que tiene contra Lozoya y dio la acusación de forma general: el exdirector de Pemex tuvo acuerdos con representantes de Odebrecht y entre 2013 y 2014 habría recibido 6.5 millones de dólares con tal de beneficiar a la empresa con contratos de obra pública cuando este estaba al frente de Pemex.
Igualmente, Lozoya habría transferido 185 mil dolares, recibidos de Odebrecht, a la cuenta de su madre. Tras esto se fue revisando cada una de las pruebas presentadas por la FGR. Pero algunas de estas fueron descartadas por el juez.
De estas, destacó la entregada por las autoridades suizas al gobierno de México en donde constaban las transferencias de Odebrecht a la empresa Latin American Capital Holding, propiedad de Lozoya en donde había recibido los sobornos.
Pero en ellas, el abogado de Lozoya Austin, Miguel Ontiveros, señaló que se estaría violando la confidencialidad de las comunicaciones privadas, pues había información bancaria sin control judicial y correos electrónicos entre funcionarios de al menos tres bancos.
Lo expuesto por la defensa de Lozoya Austin fue considerado por el juez Genaro Alarcón López, quien privilegió la inviolabilidad de comunicaciones y excluyó la prueba.
Pero no solo fue esta, sino que también se desetimaron informes bancarios entregados por el director de Odebrecht México, Luis Meneses Weyll, acerca de transferencias a empresas offshore que habrían sido utilizadas por la empresa brasileña para depositos millonarios destinados a sobornos.
Al verse cercada, la FGR trató de mantener esta útima alegando que De Meneses había entregado la información como funcionario, pero el abogado de Lozoya Austin espetó que dicha información contenía datos de otras empresas.
Por otro lado, también se anuló como prueba el acuerdo reparatorio que la empresa Odebrecht alcanzó en Estados Unidos, pues de acuerdo con el medio La Jornada, se argumentó que las normas mexicanas no admitían incluir antecedentes procesales que se relacionaran con el caso.
Fue así que se consideró que se había obtenido de forma ilegal por parte de la FGR. Sin embargo, fueron aprobadas los testimonios de Marcelo Bahia Odebrecht, Luis Alberto de Meneses Weyll y otros cuatro de los principales integrantes de la empresa brasileña.
Aún con esto, la defensa de Lozoya Austin informó que impugnará 15 de las 66 pruebas proyectada por el Ministerio Público Federal. Por último, Lozoya no logró llegar a un acuerdo reparatorio con el Gobierno de México para que le otorgaran un criterio de oportunidad en el caso de sobornos de Odebrecht.
Señaló respecto a los recursos solicitados por el Estado mexicano para la reparación del daño que, con un “enorme esfuerzo” lograron juntar 10 millones 700 mil dólares. Además dijo estar con la “firme decisión” de rectificar su denuncia y reparar el daño.
Pero el estado mexicano solicitó al exfuncionario y a su familia un acuerdo reparatorio mayor a los 200 millones de pesos.
jpob
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