Debido a que se cuentan con un sector agrícola exportador fuertemente vinculado a México; los estados de Texas, Iowa, Nebraska, Misisipi y Alabama, en Estados Unidos de América, son los que más sufrirían un cambio restrictivo del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) o la salida del acuerdo comercial, señala un análisis del Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques (CEIGB) del Senado de la República.
Añade que el intercambio comercial entre México y Estados Unidos es uno de los más intensos y dinámicos del mundo; en ese contexto, uno de los sectores más importantes es el agrícola.
De acuerdo a la investigación, durante 2016 México se convirtió en el principal proveedor de productos agrícolas, con casi 20 por ciento de los productos que se comercializan en Estados Unidos, superando a Canadá y a la Unión Europea. Esto se debe principalmente al TLCAN, que permitió eliminar los aranceles y las restricciones cuantitativas sobre los productos agrícolas.
El CEIGB señala en su análisis, “El sector agrícola en el comercio bilateral y su importancia de cara a la renegociación del TLCAN”, que durante los últimos diez años las exportaciones estadounidenses hacia México, en el mismo sector, han aumentado 64 por ciento.
En el caso específico de Texas, a pesar de que no hay ningún bien agrícola que se ubique dentro de los principales productos comerciados con México, la dependencia del comercio transfronterizo provoca que el impacto potencial ante el incremento en los aranceles agropecuarios sea especialmente dañino para esta entidad.
En relación con Iowa, sus exportaciones hacia México se han multiplicado por diez a partir de la entrada en vigor del TLCAN. Se estima que el costo potencial para este estado de una cancelación del acceso preferencial al mercado mexicano sería de hasta 15 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) estatal.
Nebraska es un estado que importa mucho menos de México de lo que exporta hacia este país, tendencia que se ha acentuado en los últimos tres años. Tan sólo entre 2015 y 2016, la tasa de crecimiento de las exportaciones de Nebraska a México fue de 15.7 por ciento, convirtiendo a nuestro país en el destino número uno para sus productos y en su segundo socio comercial después de Canadá.
México es el tercer socio comercial de Misisipi. En esta relación la balanza comercial está relativamente equilibrada, e incluso refleja un ligero superávit a favor de México.
Desde la entrada en vigor del TLCAN, las exportaciones de Alabama hacia México se han multiplicado por diez. El costo potencial de una cancelación de las reglas actuales de acceso al mercado mexicano sería de alrededor del 10 por ciento del PIB estatal.
El CEIGB plantea la necesidad de seguir estudiando a detalle las estructuras económicas locales estadounidenses y los entramados de intereses que generan, a fin de identificar aliados potenciales que puedan fungir como vehículo para los intereses comerciales de México ante los tomadores de decisiones en Washington.