El presidente Obama presenta su iniciativa de modificación a la Ley al Control de Armas.
El miércoles 16 de enero, en la Casa Blanca, el presidente Barack Obama, acompañado del vicepresidente Joe Biden, reveló los aspectos fundamentales de tal iniciativa como respuesta a la mayor masacre ocurrida en los Estados Unidos en la escuela elemental de Newton Connecticut.
La iniciativa, por su contenido, es considerada como el mayor esfuerzo legislativo, en décadas, para detener el uso indiscriminado de armas de fuego en el país. El plan incluye acciones ejecutivas y legislativas cuyo objetivo es disminuir la violencia que se genera por el uso de esas.
Entre las principales modificaciones se incluye: Una nueva prohibición a las armas de asalto, así como, la obligatoriedad en cuanto al chequeo y la revisión de antecedentes de los compradores.
La determinación del presidente es concertar medidas que generen leyes mas estrictas, para prevenir nuevas tragedias como las ocurridas, en Newton, CT; Aurora, en Colorado, entre otras mas, a lo largo del país durante los últimos años.
Las propuestas son producto del consenso realizado por el vicepresidente Biden, incluidos representantes de la industria de armas y entretenimiento.
El presidente Obama urgió al Congreso a renovar la prohibición de venta de armas de asalto que expiró en el 2004, que comprendía la revisión de antecedentes criminales de los compradores de cualquier arma de fuego, incluyendo los huecos legales que permite el comercio de armas en ferias y exhibiciones.
También presenta un control más riguroso para evitar el tráfico de armas interestatal, como respuesta a la solicitud de los alcaldes para mantener sus ciudades más seguras.
La iniciativa incluye 23 medidas, algunas de las cuales el presidente pondrá en vigor sin la aprobación del congreso como órdenes ejecutivas, dentro de estas: el mejoramiento del sistema federal de antecedentes y chequeo; la desaparición de la ley que impide al gobierno federal a realizar investigaciones sobre violencia generada por el uso de armas de fuego; aumentar el número de consejeros y oficiales en escuelas y, ampliar el acceso a los servicios de salud mental.
Se espera que los cabilderos de la NRA en el Congreso, así como, los legisladores republicanos se opongan a la iniciativa por considerarla que va en contra de la Segunda Enmienda a la Constitución, con el pretexto de proteger el derecho de uso de los ciudadanos.
A pesar de la oposición, la Segunda Enmienda, toca las fibras más íntimas de la sociedad, por tratarse de un derecho constitucional dentro de una cultura arraigada a la libertad del uso de armas, sin embargo, la mayoría de los ciudadanos, están a favor de las propuestas del presidente.
Sin duda el esfuerzo, de Barack Obama, por acotar a la violencia producto del uso irrestricto de armas, tendrá un costo político muy alto, y en las próximas semanas el tema será motivo de severas críticas y controvertidas opiniones.