LOS CAPITALES
Por EDGAR GONZALEZ MARTINEZ
Este grupo empresarial -de los más grandes del país en el segmento del mayoreo y medio mayoreo de abarrotes-, crecerá el próximo año hasta un 7% y alcanzará ventas superiores a los 1,000 millones de dólares. Así lo afirmó el CEO Dieter Holtz, y asegura que los próximos años la empresa logrará crecimientos en un rango de 4% al 7%, después de estancarse unos años como los que se tenían antes de la pandemia. Durante la crisis sanitaria se tuvieron picos de crecimiento de hasta 20%.
El directivo de Grupo Sahuayo explica que este año las ventas crecerán 3% con ingresos de 1,000 millones de dólares, pero se dice optimista y tiene razones fundadas para calcular que la empresa podría llegar a tener en los próximos años ventas de 2,000 millones de dólares y crecimientos orgánicos entre 4% al 7% en los años por venir. En algunas regiones del país ya se tiene estos niveles. Se realizarán inversiones estratégicas y transformaciones en la empresa.
Para lograr estos volúmenes de venta, plantean el CEO Dieter Holtz y el CFO, Javier García, “vamos a tomar varias decisiones para disparar el despegue de la compañía: impulsar la innovación, lograr la excelencia operativa y consolidar el corporativo.
Desde que llegaron a la empresa durante la segunda mitad de este año hicieron correcciones tácticas en toda la empresa, y sobre todo “ya estamos trabajando mejor con la data disponible para lograr una mayor rentabilidad a nuestros proveedores, estamos bajando costos, estamos mejorando los tiempos de entrega y ampliando la base de clientes, entre otras cosas”, explican los ejecutivos.
Vamos a meterle mucho empeño al uso de la tecnología y a la aplicación de la Inteligencia Artificial para comprender mejor al mercado y el cambio de esquemas de consumo de los mexicanos; estamos desarrollando inteligencia de mercado para atender mejor a nuestro cliente que puede ser desde un micro negocio hasta una tienda de abarrotes mayor.
El negocio del abarrote es muy dinámico, cambiante y con el uso de las nuevas tecnología aplicadas a esquemas de bvancariacion van a ser más exigentes. Además, cada año se suman jugadores con mayor innovación.
Grupo Sahuayo cuenta con 25 centros de distribución y una cobertura prácticamente nacional. La empresa identifica oportunidades diferenciadas según región.
El norte del país y el Bajío son dos de las zonas con mayor potencial. En el segundo caso, la concentración geográfica y la infraestructura disponible permiten una logística más eficiente. La región sureste mantiene retos geográficos, poblacionales y económicos, pero ciudades como Mérida, Oaxaca y Tapachula registran crecimientos relevantes; esta última, además, funciona como punto natural de exportación hacia Centroamérica.
En el Pacífico, Culiacán muestra un buen desempeño pese al contexto de inseguridad, mientras que Tijuana combina el crecimiento local con la atención al llamado “canal de nostalgia” en Estados Unidos. La Ciudad de México y su zona metropolitana también se ubican entre las áreas con potencial de expansión.
Dieter asegura que va a entregar buenas cuentas a los inversionistas, porque vamos a acelerar mayor valor y las ventas rentables para las marcas que confían su negocio, ampliar nuestra base de clientes y revisar detenidamente los portafolios de productos.
A su vez, Javier García, CFO, detalló: internamente estamos enfocando las operaciones a mejorar nuestro flujo de efectivo para reinvertir estratégicamente en nuestro crecimiento y estamos analizando soluciones financieras para nuestra base de clientes como una de las nuevas plataformas de valor agregado para nuestros canales.
El peso mexicano cerró una semana de fortaleza clara y consistente: IMB Capital Quants.
Consolidándose como una de las monedas emergentes con mejor desempeño, el peso mexicano pasó de una apertura en 18.48 a un cierre en 18.29, dentro de un rango marcado por un máximo de 18.52 y un mínimo de 18.28, lo que se traduce en una apreciación de aproximadamente 1%. En paralelo, el índice bursátil local avanzó 2,65%, señalando un incremento sólido en el apetito por riesgo dentro del mercado mexicano.
El tono positivo comenzó desde el lunes, cuando el peso reaccionó favorablemente a los datos de inflación de la primera quincena: 3.6% en la general y 4% en la subyacente, lecturas que reforzaron la expectativa de que Banxico mantendrá un enfoque restrictivo pero prudente, preservando un diferencial de tasas atractivo. A eso se sumó su liderazgo en carry trade, respaldado por un dólar debilitado y un entorno global que comenzaba a descontar un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal en diciembre.
A mitad de semana, el catalizador clave fue el superávit comercial de octubre, el primero desde junio y sustancialmente mayor al esperado. Las exportaciones manufactureras y del sector extractivo sorprendieron al alza, aportando señales de resistencia externa incluso en un entorno global de menor dinamismo. Este dato redujo temores sobre la posición externa del país y fortaleció la narrativa de un México competitivo y con flujos constantes hacia sectores industriales.
Hacia el final de la semana, el peso recibió un impulso adicional gracias a un dato laboral mejor de lo esperado: la tasa de desempleo se ubicó en 2.6%, inferior al consenso y todavía por debajo del promedio semestral. Esta fortaleza del mercado laboral, junto con la revisión a la baja de las expectativas de inflación (de 3.7% a 3.5% al cierre del año), consolidó la visión de que Banxico puede mantener una postura restrictiva por más tiempo. El debilitamiento del dólar (ante crecientes expectativas sobre un recorte inminente de la Fed) permitió al peso mantenerse en niveles estables.
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