* Haber negado conocer al líder de la secta NXIVM, Keith Raniere, para ser exhibida poco después en un video al lado del desquiciado sujeto que purga una condena de 120 años, ha ocasionado una seria caída de Clara Luz Flores en las encuestas; para el aspirante a la gubernatura de Hidalgo en el 2022 y delegado especial de Morena en tierras regias, Julio Menchaca, las cosas se le complican porque de entregar buenas cuentas en esa entidad, depende su futuro político
Por Antonio Ortigoza Vázquez
Especial de Expediente Ultra
Desde enero, los analistas políticos de Nuevo León -el más industrializado y rico del país- no atinaban a entender que podía tener en común la alcaldesa Clara Luz Flores con la supuesta ideología de izquierda de Morena, como para mandarla de candidata al gobierno estatal.
Pero al estallar el escándalo de sus ligas con “la secta sexual” NXIVM se descubrió un revelador punto de encuentro: Tanto en la 4T como en la sórdida organización de Keith Raniere se exige, de entrada “obediencia ciega”.
La candidata se echó sola la soga al cuello cuando negó en primera instancia conocer al deschavetado Raniere.
Ahora, Raniere purga en Estados Unidos una condena de 120 años de prisión por los abominables abusos, sexuales y de otro tipo, cometidos contra las mujeres de su feligresía, y en Nuevo León, Clara Luz se derrumba en las encuestas y el lodo pútrido en que se ahoga su causa comienza a cubrir tanto al delegado de Morena, el hidalguense Julio Menchaca, como al líder nacional morenista Mario Delgado, quien también tuvo mucho qué ver con la organización de Raniere; escándañp donde se ha visto involucrado Emiliano Salinas Occelli, hijo de Carlos Salinas de Gortari, lo que seguramente no tiene precisamente contento al señor presidente, Andrés Manuel López Obrador.
¿Será acaso que el asesor jurídico, Julio Scherer Ibarra, omitió ese pequeñísimo detalle al recomendar a la ex priísta con el Jefe del Ejecutivo?
Entre los damnificados, destaca el caso del senador Menchaca, toda vez que los resultados que obtenga de su gestión en Nuevo León serán decisivos para la suerte que corra su pretensión de la candidatura de Morena para Hidalgo en 2022. Todo parecía miel sobre hojuelas, hasta que le cayó el chahuistle, con el derrumbe de su candidata, que le arrastra a su vez en su proyecto personal. Mala suerte.
“LOS CURSOS DE SUPERACIÓN” DE CLARA Y MARIO
El escándalo trasciende Nuevo León y en todo el país es la comidilla -lo mismo en Estados Unidos- porque, entre otros detalles que mantienen en divertida perplejidad a los comentaristas, es que tanto Clara Luz como Delgado han recurrido a una inveterada costumbre en la política mexicana: apelar a una autoconfesada imbecilidad congénita antes que admitir una responsabilidad personal.
“Sólo tomé un curso de superación personal”, alegan al unísono Clara Luz y Delgado, mientras por todo el mundillo político arquean las cejas y sonríen malévolos, lo que recuerda la vieja anécdota de la esposa que llega a medianoche a casa, con aliento alcohólico y algo despeinada y le dice al marido: “Mi jefe me invitó a cenar y ¿qué crees? la plática se alargó”. (Y el furioso marido imagina otro tipo de alargamiento).
El caso es que a poco más de dos meses de los comicios de junio, la alcaldesa con licencia que hace dos meses parecía imbatible en las preferencias electorales y ya la veían como segura gobernadora, comienza lo que puede ser un estrepitoso derrumbe en tanto que su odiado rival, Adrián de la Garza, candidato de la coalición PRI-PRD ya la aventaja con cuatro puntos porcentuales en varias encuestas.
MENCHACA, ¿SOLO FLORERO?
En Morena comienzan a preguntarse qué ha venido haciendo el senador Menchaca como delegado en Nuevo León: ¿Acaso no realizó una revisión del perfil de la ex alcaldesa? ¿No tomó en cuenta, como un referente, que el marido dijera a voz en cuello que “no votan por mi mujer, votan por mí, yo manejo todo”?
Pero comienzan a difundirse versiones que, finalmente, tampoco dejan bien parado al senador Menchaca: que Mario Delgado, correligionario de Clara Luz en la secta sexual NXIVM, cobró una gruesa cantidad para impulsar la candidatura. En ese caso, el senador hidalguense habría sido únicamente una marioneta (De Mario Delgado) en el enjuague.
Un comentarista regiomontano escribió recientemente algo que revela la fragilidad de la señora Flores como candidata, inclusive semanas antes que le reventara el escándalo de NXIVM con el video donde Raniere la entrevista una hora 20 minutos: “Clara Luz construyó su candidatura sobre fuerzas yuxtapuestas y restó demasiado en poco tiempo. Siempre fue favorita en las encuestas, pero ya dilapidó su ventaja. ¿Quién la asesora? Uno de los mejores gurús de México y por eso no terminó de entender las razones para tantas decisiones erráticas: ataques al medinismo, tempranos en la campaña; guerra sucia precoz que demostró temor hacia Adrián de la Garza. Enseguida llegaron los videos con la secta sexual… la recuperación se ve difícil y De la Garza se pinta solo para nadar de espalda”.
Al tener un marido con talante patriarcal, antecedentes de mapache y de charro cetemista, Clara Luz escupe al cielo cuando acusa a De la Garza de corrupto.
Y en Hidalgo, por su parte, comienzan las especulaciones acerca de las pretensiones de Menchaca para el 2022, con la sucesión en la gubernatura. La ola expansiva del escándalo de Clara Luz-Delgado, le puede pegar fuerte al precandidato florero.