Fuera de todo
Denise Díaz Ricárdez
La semana entrante el país contará con un cambio profundo en lo referente a la inminente aprobación de la reforma que sustancialmente facultará la selección de ministros, magistrados y jueces a través del voto, lo que implica a la vez un ajuste al equilibrio entre los poderes constitucionales del ejecutivo, legislativo y el judicial.
Como a cualquier sociedad le ocurre hay muchos lastres positivos y negativos que van determinando las historias respectivas a cada una. En el caso específico del poder judicial de la federación, con casi 55 mil empleados y aproximadamente dos mil jueces, se fue conformando de una combinación de personas altamente capacitadas y de honorabilidad comprobada con otras que no tanto.
Y así hay amigas, amigos, parientes, compadres, novias, novios, esposas, esposos, de todo, con sueldos que millonarios. Y otras formas, como es desde el extravío de expedientes, la dilación, el cochupo, el abuso de amparos, en fin juicios que pueden mantener el sueño eterno o bien la eficiencia máxima.
Sin olvidar que muchas veces las y los jueces, aquellos que ven delitos graves del fuero federal –como son el secuestro, el narcotráfico, la portación ilegal de armas- ponen a estos funcionarios a meditar sus decisiones con todo cuidado por aquello de que “coopelas o cuello” diría el chinito Zhenli Ye Gon, aquel que tenía su guardadito en dólares en serio en las Lomas de Chapultepec de la Ciudad de México, luego de que Fox le otorgará la nacionalidad.
El Senado de la República tiene previsto someter al pleno el miércoles próximo la minuta enviada por la Cámara de Diputados para hacer efectiva constitucionalmente la reforma al poder judicial, que tantos pros y contras conlleva y que son del dominio público, por aquello de los votos a favor o en contra de aspirantes a jueces, magistrados y ministros.
Y ya que en esas andamos, a ver cuándo empieza la revisión más que a fondo de las fiscalías generales de los 32 estados del país, otra realidad que espera y desespera, porque poco pueden hacer los jueces con carpetas de investigación que van muchas veces más maquilladas que miss universo.