La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Así como hay chairos monárquicos existen barriobajeros de sangre azul
A lo largo de la semana, hemos sido testigos, del pleito de cantina que protagonizan el senador Julen Rementería del Puerto y el alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez, aunque el aparente motivo es la filtración de fotos y ‘fuego amigo’ en las redes sociales, el trasfondo, son las candidaturas en 2021 y desde luego, la de 2024 a la gubernatura.
Como es costumbre, Yunes busca imponer su proyecto y, por su parte, el legislador quiere esa posición para su hijo Bingen, todo partiendo de un razonable supuesto (que no es inamovible): el panismo tiene amplias posibilidades de conservar la plaza.
Desde luego, el puerto es la joya de la corona que el gobernante partido MORENA, quisiera tener bajo control con miras a la sucesión de Cuitláhuac, por lo tanto, el conflicto albiazul, es música para los oídos de la 4T local.
Cabe destacar que los Yunes del estero, fueron expulsados del Comité Directivo Estatal del PAN, por lo que no llevan mano en la elección de candidatos, a menos que aceptaran ceder ayuntamientos y distritos clave de su bastión, lo que se ve difícil.
El escenario es un juego de perder-perder, porque Bingen, de ser favorecido, requiere el apoyo del alcalde y éste, necesita aliados para su futuro político, por lo tanto, el panismo tendría un retroceso respecto de lo ganado en 2018. Ni hablar, la ambición los pierde.