La insoslayable brevedad
Javier Roldán Dávila
Lo que ignoran, es que los ‘cadáveres que siembran’, un día habrán de florecer
Como el diputado Sergio Gutiérrez Luna, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, súper delegado de la secretaría de Bienestar en Veracruz, está convertido en uno de los ‘target’ del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, la razón: su amistad y, por ende, cercanía con el presidente López Obrador.
Así pues, Huerta es acosado, mediáticamente, por supuestas faltas cometidas en su andar por la administración pública, sin embargo, sin aclarar los temas, el funcionario es linchado por los panegiristas del Cui.
Con base en adjetivaciones, para no variar, el antiguo, y verdadero militante de izquierda, es acribillado por los huestes oficiales y oficiosas, lo cual confirma que, en Veracruz, hacer política es un privilegio que se quiere reservar para los elegidos del sistema, o sea, todos los morenos son hermanos, pero no son iguales.
La pregunta obligada es: ¿por qué el miedo cerval del Cui? ¿por qué los vituperios a Gutiérrez Luna y Huerta? ¿qué buscan impedir?
Ignoramos la respuesta (bueno, en términos de ‘la boa’, todo Veracruz: lo sabe, lo sabe).
Lo cierto es que, de continuar las tendencias, el góber sabadaba tendrá que entregar la banda a un personaje que no está en sus contactos favoritos…mientras, Manuel y Sergio, insistimos, siguen haciendo política. El que ríe a la último, se jode al buleador.
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