Dentro de la paleoantropología, de acuerdo a la teoría de Raymond Dart, en África, los primeros homínidos vivieron una Cultura Osteodontoquerática, llamada así por el uso de huesos, dientes (mandíbulas) y cuernos como herramientas, habiendo bajado de los árboles, fueron capaces de comenzar a utilizar sus ahora libres manos para la creación de las mismas, dicha teoría ha sido refutada por otras más recientes en las que se habla de que fueron otras las primeras herramientas y en diferentes épocas, pero como ni esta es una columna de antropología ni yo antropólogo, no nos pondremos a juzgar quien lleva la razón, pero creo queda claro que nuestros prehistóricos antepasados comenzaron a usar herramientas, en un principio sin siquiera saber el uso que podrían dar a ellas, pues no creo que desde que levantaron el primer cuerno supieran todos los usos que le pudieran dar al mismo.
Pues bien, desde el momento en que los primeros homínidos utilizaron restos animales o rocas como herramientas hasta llegar a la invención y uso de la primera herramienta de labranza, actividad que hizo que la humanidad diera un salto cuántico en la evolución, seguramente, hubo momentos en el que nuestros antepasados no sabían lo que tenían entre manos, muchas veces esas valiosas herramientas fueron desperdiciadas, mal utilizadas o, de plano abandonadas, por algunos grupos, pensando que eran inútiles o por miedo al avance que representaban.
En los tiempos que corren el uso que la humanidad está dando al internet, la informática, la robótica recuerda mucho a esos homínidos que en un principio no sabían la utilidad de las herramientas que tenían entre manos, estamos ante el inicio de la herramienta que debe ayudar a la humanidad a dar ese otro paso en la evolución, sin embargo en lo que llega ese momento esas valiosas herramientas está siendo muchas veces desperdiciadas o mal utilizadas, cada día vemos como hay homínidos modernos que dan figurados golpes contra la roca o contra el piso, sin dar el uso adecuado a estas nuevas herramientas.
Las redes sociales, los diferentes programas, la maquinaria, las aplicaciones, las energías alternas son bosquejos de lo que puede llegar a ser pero que muchas veces siguen manteniendo en estado latente el auténtico beneficio para la raza humana, además, que como seguramente sucedió en el pasado, hay grupos que ante la oportunidad de un cambio, luchan por mantener las cosas como estaban, violentando o boicoteando a aquellos que quieren evolucionar, para mantener lo que ellos creen es mejor, aunque, usualmente solo para ellos.
Esperemos llegue pronto el día que tengamos nuestros primeros campos tecnológicos cultivados, que nos indiquen que ya estamos en el camino correcto.
Antes, tenemos que hacer a un lado a los violentos, a los explotadores, a los jefes de los clanes que quieren mantenernos en las cavernas.
Jorge A. Barrientos