Por Deborah Buiza
Hace muchos años tuve la oportunidad de asistir a un examen profesional de una persona a la que no sólo le tenía aprecio sino que admiraba por su inteligencia, recuerdo que al verle presentando con tanta seguridad el tema pensé “me gustaría mucho aprenderle, trabajar para ella”. La vida fue buena y muchos años después tuve esa oportunidad.
Hace relativamente muy pocos años me re encontré a un compañero de la escuela, con quien la convivencia en las aulas y a nivel personal había sido realmente mínima pero a quien yo admiraba por su desempeño profesional, sentada en la que era su oficina en ese entonces pensé “¡wow! Me encantaría aprender de él”.
La vida nuevamente fue buena y muchos años después de ese encuentro me ha permitido compartir el espacio profesional y poder aprender de él.
¿Te ha pasado que conoces a alguien y piensas que sería fabuloso que fuera tu maestro y tú su aprendiz?
He de confesar que no me encanta a totalidad la idea de que todos o cualquiera puede ser tu maestro, pero sin duda hay personas que sin tener una “asignación” o un título oficial de maestro, coach, sensei o instructor podrían ayudarnos con lo que saben a hacer nuestra vida personal o laboral mucho más rica o eficiente.
¿A quién de tus amistades le aprenderías la administración del hogar? ¿A quién le puedes aprender la manera de resolver los problemas? ¿A quién le preguntarías sus estrategias para mejorar tu carrera profesional? No tienes que ir muy lejos para tener un buen maestro o coach ¡mira a tu alrededor seguro hay alguien de quien puedes aprender al alcance de tu mano!
Se dice que cuando el alumno está listo el maestro aparece, y tal vez en algunos casos sea así, o tal vez deba uno salir a buscar al maestro que necesita para aprender o des aprender algo para poder seguir avanzando, creciendo, disfrutando o experimentando. Si fuera cierto que la vida es como la escuela y uno es el alumno, hay que darse a la tarea de conseguirse buenos maestros y uno aplicarse a aprender lo más que se pueda.
¿Qué temas te hace falta explorar o mejorar? ¿Alguien a tu alrededor te podría dar pistas? ¿Cómo es el maestro que ahora necesitas?
La gente a mi alrededor no lo sabe, pero así como el meme, los observo en cómo hacen las cosas y tomo nota, aquello que siento que puede funcionarme trato de “tropicalizarlo” a mis circunstancias y necesidades, así he encontrado que hay cosas que me funcionan mejor y otras que no son para mí, pero al menos probé una forma nueva. Para mí ha sido todo un lujo y un privilegio encontrar en el camino personas que me han permitido compartir los espacios, personales y profesionales, y aprender de ellos, y para quienes no encuentro palabras que expresen el agradecimiento que siento por la formación que he recibido.
A estas alturas creo que sabemos que no sólo somos lo que nuestros padres y madres hicieron de nosotros o lo que aprendimos de la familia o en la escuela durante nuestros primeros años, tenemos claro que no somos personas terminadas sino un proyecto que está en constante creación y re creación, que puede actualizarse, renovarse y modificarse tanto como se quiera o se pueda, para lo cual necesitamos nuevos aprendizajes y guías.
Y tu ¿a quién buscarías para que fuera tu maestro?