Otro escándalo que pronto podría estallarle al ex Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, quizá poco antes de que pise suelo mexicano el presidente francés Françoise Hollande, dentro de unas semanas. Éste nuevo aquelarre es de seguridad ciudadana:
Le platico primero de que hay en el ciberespacio una página web dedicada a informar sobre Seguridad y Defensa da a conocer que el grupo francés de electrónica de Defensa y Aeroespacial Thales obtuvo en 2013 beneficios operativos de 1mil millones de euros, un ocho por ciento más que en el año anterior, al compensar los descensos de sus negocios en Europa con los que llevó a cabo en mercados emergentes en el golfo Pérsico y, claro, en México donde ese mismo año hubo un pastel a repartir, para ese rubro, de 1 mil 200 millones de dólares.
Thales fue subcontratada por Telmex, hace cuatro años, cuando inició el contrato para desarrollar y poner en operación el Sistema SMSC4i4 de la ciudad de México, esto es, el de videovigilancia de las calles y avenidas capitalinas.
Se presuponía, que la empresa francesa sub contratada, tenía el mayor reconocimiento tecnológico como empresa integradora de soluciones en materia de defensa y seguridad civil.
No sólo eso, sus ofertas resultaban atractivas porque planteaban múltiples aplicaciones de inteligencia, desarrollos “propios de aplicaciones de software de última generación y las soluciones más avanzadas de video análisis en tiempo real y a posteriori, de las zonas sujetas a investigación, así como otros desarrollos de software avanzados, relacionados con el propio sistema.
En ese momento las referencias comerciales presentadas, hicieron suponer, que Thales tenía una vasta experiencia en el diseño de sistemas SMSC4i4, de tal forma, que el gobierno de Marcelo Ebrard, confiado en esa supuesta experiencia tecnológica, autorizó el contrato estimando su implementación puntual en tiempo y forma.
El monto total del contrato original, ascendió a aproximadamente 500 millones de pesos, dividiéndose en 50% para Telmex y 50% para la subcontratada.
Hacer negocios con Thales era como un sueño… que más adelante se volvió pesadilla.
Y NO FUNCIONA
El atractivo de una solución llave en mano, desde el diseño hasta la puesta en marcha, integrando varias plataformas de software sobre un aplicativo de gestión, como responsabilidad de Thales, resultaba un argumento de ventas decisivo respecto a las propuestas de empresas españolas e israelitas, además la empresa francesa ofreció también la instalación de un laboratorio de capacitación y un vasto programa de transferencia de tecnología, ofertas y compromisos que, como sus equipos, tampoco fueron cumplidos.
Thales buscaba ampliar su negocios hacia otro “mercado emergente”, como el latinoamericano, y lo hubiese garantizado en la medida en que este proyecto emblemático y de gran cobertura hubiera sido desarrollado de manera eficiente y exitosa. Desafortunadamente no fue el caso, por causa del incumplimiento de las soluciones tecnológicas convenidas que restringen la operación por parte de las autoridades locales, ahora encabezada por Miguel Ángel Mancera.
Los antecedentes y referencias comerciales referentes a proyectos similares exhibidos por Thales resultaron insuficientes y en algunos casos de dudosa veracidad –dijeron haber instalado soluciones idénticas en ciudades del sudeste asiático, lo que no fue cierto–, para sustentar, técnicamente, las soluciones requeridas en la ciudad de México: además, es muy importante subrayar que las manifiestas debilidades, la falta de experiencia, de liderazgo y la poca capacidad de interrelación del grupo de especialistas asignado por THALES para el desarrollo del proyecto, contribuyeron a que las expectativas tecnológicas no fueran cumplidas en su cabalidad, cuando significaban la parte importante y sustancial del proyecto “CIUDAD SEGURA”, que tanto cacaraqueó Ebrard.
Ahora, el Centro de Atención de Emergencias y Protección Ciudadana de la Ciudad de México (CAEPCCM), que es el organismo creado por el Gobierno del Distrito Federal para el desarrollo del proyecto Ciudad Segura, expresa el incumplimiento de los términos del contrato, en especial, en temas como: los algoritmos de análisis de imagen, la arquitectura del software, y la carencia de aplicativos de inteligencia, entre otros aspectos tecnológicos.
Con decirle que las muchas cámaras instaladas en el DF, dejan de transmitir imagen si cualquiera alumbra su lente con una simple linterna de mano. (Continuará)
– vaya con los Thales de Billeto-te !! con tanta pompa q andamos x el mundo promoviendo la inversion ?? en Mexico. Atasquense q aqui hay boda!!!