DESDE NUEVA YORK
Ruben Cazalet
En esta ocasión notas breves. Tres casos diferentes, cada uno con aristas a extender por la circunstancia y el tiempo. Mismos los compartiré a mi manera en próximas entregas.
Comenzare con el presidente de Estados Unidos, el singular Donald John Trump.
Trump. Recuerdo en esta misma arena compartí mi adversidad, mi particular aversión a su arrogancia, a una visión desviada de la realidad, a la demagogia, la disfunción de la verdad, el yo-yo su marca.
Acepto la capacidad del encantador de serpientes para desviar al acecho de los medios de comunicación. Maestro para pervertir a sus seguidores. Caja de resonancia de un segmento de la población a exaltar la supremacía blanca.
Tuve oportunidad de estar en su despacho, antes su candidatura, el motivo, averiguaba sobre un desarrollo turístico en Baja California, el cual se quedó en detente. Un cliente me propuso comprar la propiedad. La reunión fue un fracaso. Desvió, y, más o menos con razonable cortesía me corrieron. Debo decir que la visita no la hice como Índice Político, sino con un colega de la revista más importante de USA, relata los grandes hoteles, destinos, restaurantes del globo. Sin su generosa mano me hubiera sido imposible llegar a la Trump Tower.
Trump guste o no, aunque sea vomitivo, lleva la macroeconomía positiva.
Del legado de Obama le ha sacado partido a su favor. Intenta borrar todo, por su indigna supremacía blanca. ¿Tiene razón?…
Un marrano en los negocios, sobrevivió por la fortuna del padre, quien lo sacó de sus desaciertos. Mecha corta, corta cultural, niño bien de cuna de sabanas de seda. Al hombrón le gana más el ego que el bienestar de los ciudadanos, el ego, el ego.
No es político, la huella en su camino es como la de Atila. Por su paso no crece la hierba.
Vaya paradoja para nosotros los votantes quienes les damos el espacio inmerecido.
Mis pifias. Vaticiné, Hillary Clinton debió ser presidente.
De ser las elecciones voto por voto, voto directo, Hillary hubiese ganado por más de tres millones en los comicios. El conteo aquí, es por colegios electorales. Un complicado sistema entre población y áreas urbanas, rurales, y suburbanas, Por decir IOWA vale 23, California 45, en fin no es voto directo.
A seis meses del mandato de Donald, aposté su destitución. Fallé en tiempo.
Tengo serios motivos por considerar su suciedad en los negocios en la iniciativa privada en NY, NJ, en el Caribe, en MX, en Rusia, Florida. Me puedo ir como hilo de media para comprobar sus fracasos. Fascinantes carpetas de hechos. ¿Y? En donde están sus declaraciones de impuestos.
Manhattan nos hace rudos, acuciosos, legales a pie juntilla.
Los escribanos de hechos, debemos ser objetivos, acepto en este caso me gana la subjetividad. No me pesa. Tampoco me siento orgulloso, pero, de no compartir mi verdad sería un absurdo narrador, sin ética, sin honor.
El proceso de investigación por la Cámara de Representes, de mayoría demócrata va armando el caso, (por la conversación, coacción con el ministro/presidente de Ucrania. Si, la regó. Si lo coaccionó) Después viene la evaluación del sistema judicial, si procede, pasara a la Cámara de Senadores de mayoría republicana. Un largo camino. A un año y medio, entre elecciones intermedias y la presidencial, es un gancho al hígado difícil digerir pero…
¿La cuestión al encantador de serpientes le favorecerá?
Este proceso es más político que legal.
En la historia de este país solo existen tres casos de impeachment/destitución. Claro, Donaldito sería el cuarto.
Quien abrió la tribuna fue el vicepresidente de Lincoln, Andrew Johnson en 1865-1868, quien tomó el poder después del asesinato del presidente. Motivo, despachó a varios secretarios de estado, sureño de cala esclavista. La brincó, por que el Senado no deseaba resurgir el fantasma de la emancipación de la esclavitud.
El segundo, Richard Nixon por el espionaje de Watergate, meter las narices en las oficinas de los demócratas para ablandar el camino a su reelección. Él tuvo la “valentía” de dimitir antes a enfrentarse al proceso de destitución. Entre nosotros un gran político (vicepresidente con el presidente, el general Eisenhower, héroe de la segunda guerra mundial), no le aplaudo, más si reconozco su tenacidad, por un pelito no le ganó la presidencia J.F. Kennedy, 100 mil votos de diferencia (en caso de ser voto directo). Su persistencia lo encumbró. Eran tiempos aciagos, la verdad, aunque cuestiono sus formas, contuvo la guerra fría, y terminó el Plan Marshall, el rescate de Europa tras la guerra.
El otro, el presidente Clinton a quien en su segundo periodo lo agarraron con la bragueta abierta en situación inapropiada con la becaria de 22 años Monica Lewinsky. También evitó la destitución, a pesar, mentir durante el proceso.
Por lo pronto, el naco vociferante, el tuitero, duerme menos, seguro va estreñido, auto consumiendo su propia mierda.
Nótese no toco el reporte Muller, más otros casos de abusos sexuales, un bonche de decisiones vía decisiones ejecutivas sin pasar por el Congreso, al cual se lo brinca por caprichoso, absurdo, no escucha, solo se oye a sí mismo. Vaya irresponsabilidad de él y, de cualquier mandatario del mundo.
Ha esquivado varios errores legales, so far, como abuso de poder, mentir, pero en esta ocasión pinta enfrentara serios problemas de credibilidad e ilegalidad. La cloaca ya se abrió, ni con Viagra podrá hacer sus correrías sexuales, menos con calmantes-coca cola; hamburguesas-le bajaran la fiebre del poder.
Lo he perseguido día a día esperando la pifia, el desliz legal, por fin llegó, confieso el caso es débil. Largo. Tortuoso, al tiempo.
Soy maleta para los vaticinios, por eso callare en esta ocasión y, se lo dejo de tarea estimado lector. Su apreciación es invaluable. Motivos tengo.
¿Lo beneficiara para la relección?… De mi parte creo que sí. Víctima del acoso del cual es maestro a pervertir los medios a favor…
Mañana los espero para darle una repasada a AMLO
PD: JOSE-JOSE. No crean que lamento su partida, la respeto, igual a quienes se adelantan, no sé, si es envidia o la nostalgia de la presencia de ya no poder marcar el telefoneo para saludar. La muerte anunciada de un gran amigo de copas, excelente intérprete, me causa sentimientos encontrados. En su momento lo platicamos, mejor irse que continuar aquí. José José, hace un par de años tuve el gusto de compartir la mesa con él y su hija Marisol y, su esposo, en un restorán al sur de la ciudad de México. Por ahí debo tener la foto. Y, yo que soy alérgico a las fotos, el, me convenció de hacer una. Muy acucioso para que saliera guapo, creo fueron dos o tres antes estuviera satisfecho. En mi caso su adelanto no me causa dolor, lo contrario, alegría, por fin está en santa paz. Abrazo querido amigo, pronto nos veremos y tocaremos la guitarra. Gloria a José José. De ti aprendí la humildad, me reafirmaste la mía.
