Utopía
Eduardo Ibarra Aguirre
Hace nueve años el papa Francisco visitó México del 12 al 17 de febrero y son varios hechos los que todavía se recuerdan, pero hubo uno especial y que me atrevo a llamar la lectura de cartilla a la conservadora jerarquía católica, en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, tanto por su posible significado como porque quizá encierre una de las explicaciones de los porqués no volvió a visitar México. Algunos estiman que “rehusó hacerlo” y el presidente Andrés Manuel López Obrador fue demasiado explícito al comentar en varias ocasiones que “los machuchones” de la Conferencia del Episcopado Mexicano no comulgaban con su avanzado pensamiento social y económico.
Con un mensaje desde el corazón, el papa Francisco exhortó a los obispos del país a “no dormirse en los laureles” y evitar “dar viejas respuestas a nuevas demandas”, en referencia a los grandes retos que desde entonces y décadas antes, planteaba el crimen organizado, y el riesgo en el que se encontraban los jóvenes y los migrantes, hoy calumniados desde las pantallas de Televisa e Imagen por la secretaria de Seguridad Interior, Kristi Noem, la troglodita a la que le robaron su bolso en Washington. ¡Candil de la calle, oscuridad de la casa!
También demandó el primer papa latinoamericano para los indígenas y sus culturas “no pocas veces masacradas”, una mirada de singular delicadeza, en el mensaje que duró más de 45 minutos, recuerda la reportera Ángeles Cruz Martínez. Don Francisco destacó, además, la necesidad de reconciliar a nuestro país con sus raíces amerindias “para no quedarse en un enigma irresuelto. Los indígenas de México aún esperan que se les reconozca efectivamente. La riqueza de su contribución y la fecundidad de su presencia son una herencia que convierte al país en una nación única y no una entre otras”.
La “lectura de cartilla” fue interpretada en su momento como un regaño tanto por los temas planteados por el líder espiritual y jefe de Estado como por el tono que utilizó en el encuentro con los obispos mexicanos, a los que convocó a mantener la unidad y el trabajo con los pobres, con los desposeídos.
Después de informar a los obispos que desconocía si existían problemas en la CEM, claridoso y retador les planteó que si era el caso, pedía que fueran resueltos, e incluso improvisó que “si han de pelear, peléense”. Los convocó, exigió, a decir lo que sienten “como hombres, en la cara, como hombres de Dios que van a rezar y discernir juntos. Si se pasaron de la raya, a pedir perdón, pero mantengan el cuerpo episcopal en comunión y unidad”.
Por si no fuera suficiente el regaño ganado a pulso por una jerarquía católica alejada de la feligresía de a pie, y no pocas veces hasta divorciada, la llamó a no tener miedo a la transparencia porque “La iglesia no necesita de la oscuridad para trabajar” y tampoco se dejen llevar por las “ilusiones seductoras de acuerdos debajo de la mesa”. Más todavía, “no pongan su confianza en carros y caballos de los faraones actuales porque nuestra fuerza es la columna de fuego que rompe la marejada del mar”.
Finalmente, el papa Francisco les exigió que tengan, una “mirada atenta y cercana, no adormecida”. Y remarcó la importancia de recordar al pueblo “cuán potentes son las raíces que han permitido la síntesis cristiana de comunión humana, cultural y espiritual”. Y sobre el desafío de las migraciones, recomendó a los obispos a “seguir (a las personas en movilidad) y alcanzarlas más allá de la frontera” con Estados Unidos en colaboración con prelados de aquel país, con reconocimiento a sus necesidades y anhelos.
Acuse de recibo
La presidenta Claudia Sheinbaum puso hoy por la mañana (22-IV), comillas con los dedos a los intelectuales del conservadurismo. Pero por supuesto que hay intelectuales sin comillas en la comentocracia, las oposiciones partidistas, empresariales, religiosas, mediáticas y criminales. Forman parte de sus filas figuras pensantes y talentosas que no por disentir abierta y prácticamente con el segundo piso de la Cuarta Transformación dejan de serlo. El debate desde “el púlpito presidencial”, como lo llaman algunas de ellas, no da licencia para negar la condición de los trabajadores intelectuales como tampoco de los manuales, porque dificulta si no es que cancela toda posibilidad para la polémica… De Tim Cook, el jefe de Apple, en 2017: “China dejó de ser un país con mano de obra barata hace muchos años, esa no es la razón por la que vamos a China para producir. Las razones son las habilidades y la cantidad de personas especializadas en una misma ubicación. Si en Estados Unidos reúnes a todos los ingenieros de herramientas (o ingenieros de precisión), no creo que pudieras llenar esta habitación. En China podrías llenar varias canchas de futbol”… Lea https://forumenlinea.com/libros/Libro_Frases.pdf (.) Y ejerza su derecho de réplica que se incluirá en la segunda edición de enero de 2026, siempre que usted sea aludido y todo marche dentro de la normalidad.
http://www.forumenlinea.com/ forum@forumenlinea.com @IbarraAguirreEd X