HOMO POLÍTICUS
PAVE SOBERANES
- Abortan Ataque Armado Contra Policías
- Pulseritas de Gamboa no lo Protegieron
- Reprueba Cuauh Prueba de Honestidad
Los entrelineados de ayer en las tapas de cuatro diarios de circulación nacional contextualizaron el atentado contra dos funcionarios de gobierno y anticiparon con rigor periodístico los resultados preliminares de las indagatorias en curso.
«Golpean a la 4T», atinó el capitalino Metro, lo cual respaldó La Jornada con un moño negro en su editorial de la contraportada Rayuela, en ocasiones más relevante políticamente que su nota central, como sucedió ayer. El Gráfico, especializado en nota roja, jugó con las palabras, también en la noticia a ocho columnas: «Amenaza clara». Por si faltara algo, El Independiente fue más explícito: «Golpe a La Mañanera, al reporte de seguridad y al corazón del país».
En Palacio Nacional cerraron deliberadamente las puertas a prensa orgánica y medios periodísticos, que no son lo mismo, lo que desvela que no querían preguntas incómodas a la presidenta Sheinbaum. En la única actividad pública de la jefa Brugada, agentes policiacos de civil revisaron a reporteros que darían cobertura al acto, de pies a cabeza y sus bolsas y mochilas. En ambos casos se confirmó lo que nos desayunamos temprano en medios particularmente impresos: golpeo, luto y amenaza. El miedo es lógico y las medidas de seguridad, también. ¿Miedo a quién?
Del ataque armado, es probable que el autor material ya haya sido capturado, así como tres copartícipes, según lo declarado por la fiscal Alcalde y el jefe Vázquez de la Policía capitalina. Confirmaron además lo que desde el martes temprano se adelantó en telediarios, redes sociales y portales de inmediatez noticiosa: fue ataque directo y amenaza. Por la tarde, alguien del gobierno de la CDMX contrató porristas, no plañideras, como se esperaría, para las honras fúnebres. «No estás sola», fue el grito para Brugada, como si estuviera en alfombra roja y no en el sepelio de dos de los colaboradores de su circulo rojo y amigos. Ella fue quien recibió el pesar, no los familiares de las víctimas mortales.
La Fiscalía citadina debe citar a la jefa de gobierno, como parte de las investigaciones del doble homicidio, porque debe tener información importante de cuando era alcaldesa de Iztapalapa, que lo fue en tres ocasiones, y, además, para explicar del por qué no sirvió la cámara de vigilancia en la escena del crimen. En el imaginario colectivo no sólo de la capital del país, sino del país mismo, consignado en medios internacionales como una probabilidad, corre la especie de que detrás del asesinato y feminicidio hay intereses, sean criminales, sean políticos, tan fuertes que obligaron a la jefa de Gobierno a reforzar su seguridad personal.
letraschiquitas
Mientras al magistrado Jorge Gamboa no lo pudieron tranquilizar ni sus pulseritas contra el mal de ojo, tras su defenestración política de Leyva 7, la policía de disuasión envió un mensaje ciertamente tranquilizador a las familias del estado de Morelos: seis peligrosos integrantes de una banda dedicada al narcotráfico, robo con violencia y a la extorsión, fueron detenidos en Cuernavaca, Jiutepec y Huitzilac, por agentes de la Secretaría de Seguridad margarista, informó su titular Miguel Ángel Urrutia, lo que es noticia balsámica ante tantas terribles en la Ciudad de México y otras entidades del país, porque, además, esos seis planeaban perpetrar un ataque armado, conocida su capacidad de violencia y fuego, dirigido contra detectives ministeriales. Otra: en Cuautla, la misma policía de azul detuvo a un extorsionador de comerciantes, en tanto el indiciado de un delito grave —¡pura nota roja!— que se paga con pena corporal, Cuauhtémoc Blanco, confunde transparencia y rendición de cuentas con honestidad, de lo cual carece triangular y absolutamente.
