Francisco Gómez Maza
• Aún hay clases: la de los pobres a nadie le importa
• Karl Marx tiene toda la razón en su método de análisis
El crecimiento de la economía le importa, le preocupa, al economista, a los grandes empresarios, a los dirigentes de los mercados financieros y bursátiles, a los políticos, a los maestros de economía de las universidades.
La gente pobre, los trabajadores mal remunerados, se conforman con comer por lo menos una vez al día, y cuando enferman gravemente van a una clínica de salubridad, o al seguro social si es que su patrón los inscribió en el IMSS. El crecimiento del PIB o del IOAE les importa un cacahuate.
Pero algo deben decir los numeritos, las curvas de Gini, las estimaciones anticipadas que emplean los jóvenes del INEGI para encontrar un indicador más adecuado, menos inexacto, del comportamiento de la economía global, que la economía individual a la mayoría de los economistas sólo les sirve para elaborar sus gráficas. Que se alimenten o no se alimenten los trabajadores miserables eso no viene al caso. Son economistas que estudian la pobreza para vivir como ricos.
Es el caso de los expertos econometristas del INEGI, que ya inventaron otro indicador que, dicen, es más cercano a la realidad que el PIB. Es el, ininteligible para un bisoño o un ignorante, IOAE (Indicador Oportuno de la Actividad Económica).
Ah, pues este misterioso IOAE que, según ellos, estima anticipadamente una variación del (IGAE), otro misterioso Indicador Global de la Actividad Económica, para el pasado mayo de 2021 contra igual mes de 2020 es de 24.8 por ciento.
Obviamente, este 24.8 es mejor que un 24.0. Lo que nadie sabe, ni sus inventores, es si es mejor que el Producto Interno Bruto. Aunque me sospecho que estas mediciones son sólo para la gran economía, la de los empresarios corporativos.
La economía popular no resiste mediciones. Es del día a día. Si hoy hay dinerito, comemos carne dura de vaca. Si no lo hay, tenemos que conformarnos con unos taquitos de frijoles fríos porque el gas subió y no hay para pagar el cilindro más pequeño.
La variación anual esperada por el INEGI de las actividades secundarias al mes de mayo de 2021 es de 36.4% y para las terciarias de 19.8 por ciento, bajo la medición del IOAE que corrige o confirma al PIB.
(El sector secundario es el sector de la economía que transforma la materia prima, que es extraída o producida por el sector primario, en productos de consumo, o en bienes de equipo. Es decir: mientras que el sector primario se limita a obtener de manera directa los “recursos de la naturaleza”, el sector secundario ejecuta procedimientos industriales para transformar dichos recursos).
(El sector servicios o sector terciario es el sector económico que engloba las actividades relacionadas con los servicios no productores o transformadores de bienes materiales. Generan servicios que se ofrecen para satisfacer las necesidades de cualquier población en el mundo. Incluye subsectores como comercio, comunicaciones, entro de llamadas, finanzas, turismo, hostelería, ocio, cultura, espectáculos, la administración pública y los denominados servicios públicos, los presta el Estado o la iniciativa privada (sanidad, educación, atención a la dependencia), entre otros.
Pues así, el INEGI informó este jueves 17 de junio que el IOAE estima una variación positiva del IGAE de 24.8% en mayo de 2021 respecto al mismo mes del año anterior. Así, de entrada, estos porcentajes son muy positivos y le tapan la boca a los monotemáticos cuestionadores de las políticas públicas del actual gobierno, que hablan y cuestionan únicamente porque su lengua no tiene esqueleto óseo y sólo abren la boca por ardidos, porque perdieron sus opulentos ingresos producto de la corrupción. ¿O no, mesié Gustav Menchevique?
Aún más: Las series consideradas presentan sus respectivos intervalos de confianza al 95 por ciento. Considerando los principales Grandes Sectores de Actividad del IGAE, se tiene, de acuerdo con los gurúes del INEGI, que para las actividades secundarias se calcula un incremento anual de 36.4% en mayo pasado, mientras que para el sector terciario el avance anual fue de 19.8 por ciento.
Aclaración no pedida pero necesaria del INIEGI: Los indicadores de actividad económica son utilizados para medir el comportamiento de una economía cuando ningún otro tipo de indicador, como el producto interno bruto (pib), puede proporcionar información sobre el estado de la economía de forma actualizada.
Pero… pero a la economía de los trabajadores, de los pobres, que cada día son más pobres, tenga por seguro que ni el IOA, ni el IGAE, y menos los economistas del INEGI la entienden. Ni les importa