Ricardo Del Muro / Austral
Las mansiones de la Casta Divina en el paseo Montejo y el centro colonial, donde está la primera catedral que se construyó en América, son algunos de los sitios que se recomiendan en las guías turísticas, pero el mayor atractivo de la hermosa Mérida está en ser una de las pocas ciudades en México en que todavía se puede caminar tranquilamente por sus calles en cualquier momento del día o de la noche, sin temor de sufrir un asalto.
La percepción de seguridad, como lo llaman los técnicos, es una sensación maravillosa que sólo puede reconocer el turista mexicano que viene de otras ciudades en donde la violencia, los secuestros y los asesinatos, se han vuelto cotidianos.
Mérida, la capital del estado de Yucatán, ha sido reconocida como la ciudad más segura del país en los últimos años, aunque en el más reciente reporte sobre Seguridad Pública Urbana del Inegi se ubica entre las cuatro primeras ciudades con mayor percepción de seguridad.
Al principio, los forasteros nos mostramos desconfiados; se toman precauciones al ir a un cajero automático y es difícil evitar el temor al pasar por una calle oscura, pero al paso de los días recobramos la seguridad y la confianza, que parecía estar olvidada.
La ciudad se distingue a nivel nacional por la ausencia de delitos de alto impacto, como son secuestro, robo bancario, asaltos en cajeros automáticos, robos violentos, homicidios o enfrentamientos entre grupos delictivos.
Por eso, el viajero se sorprende al encontrar una ciudad llena de paz, tranquila, con gente amable y hospitalaria. En el centro histórico de Mérida está el café La Habana que permanece abierto las 24 horas. Las tarifas de los taxis, aún los que prestan servicio al Aeropuerto, no son abusivas y la mayoría de los restaurantes tienen precios razonables.
Más de 3.7 millones de pasajeros llegaron el año pasado al Aeropuerto Internacional de Mérida “Manuel Crescencio Rejón”, una cifra sin precedente que refleja el atractivo que tiene la capital yucateca para turistas y empresarios.
Para este año, de acuerdo a las estimaciones de viajes de Booking.com, Mérida se ubicará dentro de los diez destinos predilectos del turismo mundial, sólo detrás de lugares como Beppu (Japón), Buenos Aires (Argentina) y Portland (Estados Unidos), entre otros.
El desarrollo de infraestructura turística, como el Tren Maya y la ampliación de Puerto Progreso, consolidaría el proyecto actual económico de Yucatán en 2024, que buscará la diversificación de actividades, señaló en entrevista con El Economista, la titular de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur), Michelle Fridman Hirsh.
Yucatán se encuentra en la séptima posición a nivel nacional con respecto a los estados que presentan mayor aportación del turismo en el PIB estatal, además de ser la cuarta entidad con más captación de inversión privada turística.
Hasta el 31 de agosto del año pasado, las inversiones en el sector turismo superaban los 31 mil 412 millones de pesos: 54 por ciento en Mérida y 46 por ciento en el interior del estado. Del monto de capitales privados, más de 30 por ciento pertenece a hoteles.
La percepción de seguridad también ha favorecido la consolidación de un poderoso grupo empresarial yucateco, donde sobresale el Grupo Bepensa, que encabeza Fernando Ponce García, ubicado en el número 64 de los 100 empresarios más importantes del país, además de que Yucatán se ha convertido en un gran atractivo para la inversión extranjera, que llegó a 5 mil 400 millones de pesos en el primer semestre de 2023. RDM