En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que se conmemora cada 10 de septiembre, es fundamental poner atención a las conductas y síntomas que pueden indicar que una persona está en riesgo de suicidio.
Y es que reconocer estos signos no es una tarea sencilla, pero pueden ser clave para ofrecer apoyo oportuno y evitar una tragedia.
Qué conductas se pueden observar para prevenir un suicidio
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), para identificar si una persona puede estar en riesgo de suicidio, es importante prestar atención a ciertas señales de alerta:
Cambios en el comportamiento: Las personas que consideran el suicidio pueden mostrar cambios drásticos en su comportamiento habitual. Esto incluye un retiro repentino de las actividades que solían disfrutar, aislamiento social, o cambios en los patrones de sueño y alimentación.
Expresiones verbales: Frases como “Quisiera desaparecer”, “No puedo más” o “La vida no vale la pena” son indicativos de un posible estado de desesperación y deberían tomarse en serio.
Pérdida de interés en la vida: La persona puede mostrar una falta de interés en su bienestar personal o el de su entorno, incluso en actividades que antes le apasionaban.
Síntomas emocionales: La depresión, la ansiedad extrema, sentimientos de desesperanza, culpa, enojo o tristeza persistente son síntomas a considerar. Estos pueden ir acompañados de cambios bruscos de humor o una tranquilidad repentina después de un período de angustia, lo cual también es una señal de alerta.
Comportamientos de riesgo: Conductas como el abuso de sustancias (alcohol, drogas), la toma de riesgos innecesarios o autolesiones son comportamientos preocupantes que podrían indicar una ideación suicida.
Desprendimiento de pertenencias: Cuando una persona empieza a regalar objetos personales de valor, hacer testamentos o despedirse de sus seres queridos, podría ser una señal de que ha considerado el suicidio.
Buscar medios para suicidarse: Intentar conseguir armas, sustancias tóxicas o información por cualquier medio sobre algunos métodos para quitarse la vida es una de las señales más claras de que alguien está en riesgo.
El suicidio en México y el mundo
El suicidio es un problema de salud pública global. Según OMS, aproximadamente 703 mil personas mueren cada año por suicidio, y por cada suicidio consumado, se estima que hay al menos 20 intentos de suicidio no fatales.
En el caso de México, el suicidio es la cuarta causa de muerte en jóvenes de entre 15 y 29 años, pues en los pasados cinco años, la tasa de suicidios en este grupo de edad se incrementó en 20 por ciento.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que en 2016, la tasa de suicidio para la población de 15 a 19 años fue de 6.9 por cada 100 mil habitantes, pero en 2022 ese índice subió a 7.7, mientras en los niños de 10 a 14 años pasó de 2 a 2.1 por cada 100 mil habitantes en ese mismo periodo.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la tasa de suicidios en México ha aumentado en los últimos años.
En 2017, la tasa de suicidio en el país fue de 5.3 por cada 100 mil habitantes, pero para 2022, la tasa aumentó a 6.3 por cada 100 mil habitantes, lo que equivale a mil 629 suicidios más en 2022 con respecto a los ocurridos en 2017.
Mientras que las Estadísticas de Defunciones Registradas (EDR) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se registró en 2023, 8 mil 837 muertes fueron suicidios, lo que representa la tercera causa de muertes en México por causas externas.
Además, esta causa de muerte sigue con mayor tendencia entre los hombres, ya que 8 de cada 10 suicidios fueron cometidos por hombres, mientras que en las mujeres la proporción fue de 2 de cada 10.
Factores de riesgo asociados al suicidio
Es importante mencionar que diversos factores de riesgo están asociados al suicidio. Estos incluyen antecedentes de problemas de salud mental (como la depresión, el trastorno bipolar o la esquizofrenia), antecedentes familiares de suicidio, experiencias traumáticas (abuso físico, emocional o sexual), discriminación, crisis económicas o deudas, enfermedades crónicas, entre otros.
¿Cómo se puede prevenir el suicidio?
La prevención del suicidio requiere una acción integral que incluya la promoción de la salud mental, el acceso a servicios de apoyo psicológico, la reducción del estigma asociado a los trastornos mentales y la capacitación a la comunidad y a los profesionales de la salud para identificar y manejar adecuadamente a las personas en riesgo.
En México, diversas organizaciones no gubernamentales y programas gubernamentales han implementado estrategias para brindar apoyo psicológico y emocional, como la Línea de la Vida (800 9112000).