Desde Nueva York
Ruben Cazalet
258 millones de personas se han desplazo a países ajenos a los suyos, generando más de 528 billones de dólares en remesas. (2000-2018). La magnitud real de las remesas mundiales podría ser mayores a las estimaciones de que se dispone por su origen oficial y oficioso. Los cinco principales países receptores de remesas son, en orden descendente; la India; China; Filipinas; México y el Pakistán. Siendo China y la India los mayores receptores con aproximadamente 60 mil millones de dólares.
Es importante señalar que las cifras mencionadas incluyen el número de inmigrantes que arribaron legalmente al país receptor. En cuanto a las remesas, la apreciación de estas queda en una mera aproximación, más no contundente. Puesto que hay personas que ingresan legalmente con visa de turista y permanecen sin documentos en el país a donde inmigraron, además, de las que efectivamente de manera ilegal irrumpieron las fronteras
En Estados Unidos como en México el tema dejo de ser un tema latente, no prioritario, a uno preeminente, explosivo. El impacto merece atención inmediata por el efecto en la agenda política, demagógica… Soslayando el análisis profundo para reconocer los beneficios socioeconómicos e, históricos de tal situación.
A ambos países se les ha salido fuera de control las oleadas de inmigrantes durante el primer semestre de 2019, causando toda suerte de críticas en contra y, pocas a favor, sin descontar la amenaza por parte del ejecutivo norteamericano de incrementar paulatinamente los aranceles del 5% al 25% a las exportaciones mexicanas a ese país, en caso México no se aplicase de manera contundente a frenar ese flujo de personas en su frontera sur.
Las medidas tomadas por el gobierno mexicano son conocidas, fortalecer esa frontera con el despliegue de seis mil efectivos de la guardia nacional. Los detractores a tal decisión no ha sido bienvenida, considerada una transgresión a la soberanía mexicana.
Basta reconocer que México, mantiene, ¿mantenía? estrictas leyes y controles de inmigración, mejores a las del país del norte y otros del mundo, circunstancia reconocida por el presidente Trump. Es un gran piropo del adalid en contra de la inmigración mexicana a su país.
En este primer semestre quienes intentan ingresar a México como vía para arribar a los Estados Unidos como refugiados o de manera irregular son centroamericanos; hondureños; guatemaltecos; salvadoreños y, en menor número africanos y caribeños. Los mexicanos ni pintan dentro de estos nutridos grupos.
¿Cómo se le escurrieron a México 416 mil inmigrantes durante el primer semestre de 2019? En relación a 130 mil en 2018, de los cuales 112 mil fueron deportados o con retorno asistido.
¿Qué sucedió? Las caravanas sobrepasaron en la frontera sur, al riguroso control del INM (Instituto Nacional de Migración), apéndice de la secretaria de gobernación. ¿Faltó soporte de la federación por ausencia, por el reacomodo de las fichas del nuevo gabinete?, o, simplemente, por el embeleso del triunfo rotundo en las elecciones del primero de julio del 2018 y, pilló a las aturdidas autoridades por los resultados en los comicios. ¡Invencibles! ¡Arrolladores! ¡Soberbios! ¡Obtusos!…
O, sería, tal vez, por mera compasión y respeto a los derechos humanos, probable corrupción o, ineficiencia de las autoridades competentes ante la avalancha de esos grupos de personas que desbordaron su capacidad y controles fronterizos.
¿El nuevo gobierno entre cambios de gabinete y ajustes, desestimó el problemón? Deja mucho a pensar, pues en el pasado, a pesar de los cambios sexenales nunca sucedió tal circunstancia. El, INM, tiene o, tenía la honrosa fama de severo y acucioso. ¿Ha dejado de ser el temible can cerbero, capaz de defender a capa y espada la frontera sur? Al igual a los demás puertos de entrada al país por vía terrestre, marina o aérea.
O, ¿qué hay detrás de tal porosidad en el sur de México?
Se podrían considerar algunos actos de corruptela aislados, más no tantos que permitieran el desbordamiento de inmigrantes de la magnitud actual.
En 2015, de los 7.300 millones de personas que constituían la población mundial, 244 millones eran migrantes internacionales: 1 de cada 30 personas. El desplazamiento de esas personas son por razones, educativas, económicas, políticas o religiosas. Refugiados aproximadamente 26 millones.
Debemos aclarar, que las inmigraciones de personas sin documentos representan en algunos casos del dos al cuatro por ciento, en relación a los inmigrantes legales. En el caso de E.U., el veintidós por ciento, cifra que merece atenderse con lupa.
A las naciones afectadas por el evento, las ha rebasado jurídica y, humanitariamente. Obligándolas a enmendar las leyes de inmigración, sin conseguir detener el flujo de personas y, menos la identidad de quienes traspasan las fronteras sin los documentos que acreditan la permanencia.
El fenómeno incide directamente en la estructura laboral, los sistemas educativos y de salud pública. La recaudación fiscal se beneficia, fomenta la desintegración familiar, de menor efecto, promueve la contracción de enfermedades venéreas derivadas de la promiscuidad, la prostitución, el consumo o distribución de estupefacientes, el tráfico de personas e, incrementa el alcoholismo.
De mayor importancia es la contribución al país anfitrión, resulta más positiva que negativa; ingresos económicos adicionales, enriquece la diversidad cultural y étnica, favorece nuevas costumbres y tradiciones; influye al arte, la música, escultura y gastronomía.
La inmigración en el tiempo tamiza las formas de conducta extrema, amalgama a la sociedad, genera conciencia, tolerancia y comunidades de visión global.