Joel Hernández Santiago
Puerto Vallarta se hizo famoso en el mundo cuando en 1963 se filmó ahí “La noche de la iguana”, una película de John Houston basada en la obra de Tennessee Williams. Por supuesto que el paraíso tenía siglos de existencia y sólo algunos pobladores y pescadores lo vivían.
Está entre las montañas del occidente mexicano y de frente al Pacífico y junto al río Ameca. Uno de esos viajeros incipientes fue John Houston que de por sí sentía un gran afecto por México y quien decidió hacer ahí una de las que serían sus películas emblemáticas.
La hizo en Mismoloya, muy cercano a lo que hoy es el centro de Vallarta. Le impresionaron al director estadounidense el clima, las aguas transparentes del mar, la arena clarísima, la selva y el aislamiento del lugar. Así que hasta allá se llevó a Richard Burton, Ava Gardner y Deborah Kerr… y de colada por ahí Elizabeth Taylor que andaba de novia de Burton.
En adelante Vallarta se convertiría en referente de playas espectaculares, mar plácido y tranquilo; lejano y en paz. Y de esto que comenzó en aquel 1963 ya han transcurrido 57 años y alcanzó un auge insospechado; se convirtió en un referente de alto turismo en México y el mundo; y se desarrolló ahí una infraestructura turística de corte diamante…
Pero también, en años recientes, se ha convertido en una zona de alto riesgo. El auge del crimen organizado, el narcotráfico, la delincuencia se asentaron en la región y esto, como ya se ve, ha traído consecuencias no sólo para la gente que vive ahí, afectada en sus vidas o patrimonio, sino también porque impacta al aspecto turístico de la zona.
Se acusa a la existencia de pandillas de distinta denominación que operan en la zona. Los intereses son muchos en toda la región de Colima y Jalisco. Es por eso que, como ya se ve, se ha incrementado el número de hechos violentos ahí.
El más reciente fue la madrugada del viernes 4 de diciembre cuando fue asesinado el ex gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval Díaz, quien gobernó la entidad (PRI) del 1 de marzo de 2013 al 5 de diciembre del 2018. (Esclarecer el hecho está en manos del gobierno estatal y del gobierno federal).
El homicidio conmocionó a millones en México, sobre todo por la manera cómo ocurrió, la importancia del personaje y el hecho mismo de que a estas alturas de gobierno uno supone que la lucha en contra de los hechos violentos en México ya hubieran dado resultados, que ya se hubiera abatido la delincuencia y la impunidad.
Esta fue una enfática promesa de campaña del actual gobierno federal, ya que la circunstancia en la que quedó el país luego de los dos gobiernos panistas (Fox y Calderón) y del gobierno priista (Enrique Peña Nieto), era de absoluta desolación, tragedia y dolor. Por tanto, la demanda más expuesta al candidato Andrés Manuel López Obrador de la coalición “Juntos haremos historia” era esa: que ya parara la violencia, el crimen, la corrupción y la impunidad.
Aun no tomaba posesión cuando decidió que se crearía una Guardia Nacional, para enfrentar el problema. Se sustituirían cuerpos policiacos existentes. Se dejaba que las entidades tuvieran sus propios cuerpos policiacos a coordinarse con la GN-Federal. Así ocurrió en marzo de 2019 cuando se anunció que estaría bajo la coordinación de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Esto es: Al principio se habló de un mando militar, pero ante la objeción de muchos por crear un cuerpo militarizado, se optó por nombrar a un titular civil –Alfonso Durazo-, aunque la parte operativa estaría en manos de expertos militares.
Más tarde, frente a la insuficiencia de esta Guardia Nacional para hacer frente al cada día más creciente problema de inseguridad pública; en los que no sólo se enfrentaban grupos violentos de distinto interés sino que de forma cada vez más agresiva éstos enfrentaban a la misma Guardia Nacional que se veía incapaz de entregar los resultados esperados.
Entonces se emitió un decreto el 11 de mayo de 2020 que ordenaba: “… a la Fuerza Armada permanente a participar de manera extraordinaria, regulada, fiscalizada subordinada y complementaria con la Guardia Nacional en las funciones de seguridad pública a cargo de ésta última, durante el tiempo en que dicha institución policial desarrolla su estructura, capacidades e implantación territorial, sin que dicha participación exceda de cinco años contados a partir de la entrada en vigor del Decreto… “
La idea era la de reforzar las fuerzas de gobierno para enfrentar al problema en la mayor parte del país. Guardia Nacional; Fuerzas Armadas; Policía cibernética: Todo dispuesto.
Pero: La aproximación de datos es de que a dos años, alrededor de 70,000 personas fueron asesinadas en México en la primera parte del sexenio y en lo que respecta a los feminicidios, durante los primeros 10 meses del año, se registraron 777.
Por supuesto la detonante de la muerte del ex gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval llama la atención en materia de garantías de seguridad pública, pero sobre todo que no se han creado alternativas de solución al problema como es la creación de empleos, la creación de fuentes de ingresos productivas y permanentes para todos los jóvenes.
No hay que olvidar que una de las causas de la incorporación de muchachos a la delincuencia es, precisamente, la falta de alicientes tanto económicos como de desarrollo profesional en el país.
Muchos optan por salir de México; otros permanecen en el desempleo o trabajo informal, pero otros buscan la salida más dolorosa para toda sociedad. ¿Qué se hace al respecto?