Héctor Calderón Hallal
He visto al pueblo de México romperse ‘el alma’ organizándose para reivindicar su historia política, sin el mínimo rastro de violencia… por la vía civil siempre… por la vía electoral y en apego a derecho; sin fraudes… forjando una nueva historia.
¿Quién se atreve a decir o a pensar siquiera que la sociedad mexicana no está preparada para protagonizar una hazaña democrática en este nuevo capítulo de su historia?
Esta vez los mexicanos –como nunca quizá- construyen su propio guión; su propio devenir. Somos nosotros mismos la protagonistas en estos tiempos de convulsión, de frente a un gobierno autoritario y que personifica el riesgo de desandar el avance democrático, destruyendo instituciones y leyes, bajo el argumento prejuicioso de una ideología caduca y sin futuro.
Bajo el argumento perverso de aquella nunca superada desigualdad entre los mexicanos, donde se invoca permanente y acomplejadamente, la prevalencia del ‘clasismo’ y el ‘racismo’, fantasmas de la narrativa de los siglos 18 y 19, nunca superados en un discurso surgido desde el colonialismo, cuya entelequia siempre fue la derrota, la opresión, el complejo de inferioridad, de parte del bando de los perdedores, que por cierto fueron criollos… y no indígenas, ni mestizos.
Hoy, el suscrito cree en esa historia diferente que se construye desde la base social del ciudadano común, desde la banqueta, desde el domicilio mismo, desde el centro laboral, desde la escuela, con el consenso de vecinos y compañeros, que también son venerables entre iguales…
Mi vecino de a lado y mi compañera laboral, también creen en esa nueva historia de lucha… y mis alumnos y mis familiares…. Todos empiezan a creer en esa hazaña democrática que se fragua para derrocar materialmente, a esa camarilla de ‘sinvergüenzas’ y aventureros, aspirantes a ser los ‘nuevos pillos’ que saquean las arcas públicas por ‘mandato de ley’… de su propia ley, dictada bajo la premisa de un falso ‘mandato del pueblo’, integrado básicamente por ‘su mayoría’ que los reconoce sólo a ellos…que fue del 30%…. y ahora se reduce al 15% o menos…. ‘mayoría para la que ellos trabajan como autoridades’ y a quienes dirigen sus políticas públicas, ignorando y pisoteando los intereses del 85% restante de la población civil de los Estados Unidos Mexicanos.
Ciertamente este momento histórico, este ‘salto mortal’ hacia la democracia asusta, consterna y hasta hace reflexionar a muchos corazones apacibles y a muchas mentalidades ciudadanas de nuestro país…. es natural, todos en alguna medida podríamos estar contrariados ante el reto de ‘tumbar a un mal Gobierno’ sin disparar una sola arma, con la fuerza de la civilidad y la organización de la sociedad; somos un pueblo que ama la paz, la armonía…. Pero que si se nos agita, si se nos agrede, si se nos humilla como integrantes de ese gran conglomerado que implica la nacionalidad mexicana –aun cuando en lo individual somos únicos e irrepetibles- también somos un guerrero implacable en cada uno de nosotros… un soldado que en cada hijo Dios le dio a esta patria con sienes de oliva.
Hemos de salir todos los registrados en el padrón nacional electoral el próximo domingo 2 de junio, a votar por Xóchitl Gálvez y por todos los candidatos del Frente Opositor “Fuerza y Corazón Por México”, por gobernadores, senadores, alcaldes, diputados federales y locales en la entidad federativa donde corresponda, a fin de “sacudir de las instancias del poder” al mal gobierno encabezado por Morena y sus aliados… y lo haremos a “punta de votos”, con la fuerza abrumadora de la mayoría que somos… tal y como quedó demostrado este domingo en la impresionante marcha y concentración nacional, simultáneamente desarrollada en el Centro Histórico de la Ciudad de México y en decenas de ciudades mexicanas y con mexicanos en el mundo.
El éxito indiscutible de esta eventualidad, aunado a la confirmación recogida durante el debate político de anoche, de que la candidata opositora ciudadana, Xóchitl Gálvez Ruíz, respaldada por el citado frente que aglutina al PAN-PRI-PRD, verdaderamente representa los intereses de cambio y de afirmación que deseamos como mayoría, nos hace ‘creer en nosotros mismos’…. La claridad de sus ideas y su sólido proyecto de Gobierno alineado al afán ciudadano mayoritario de paz, orden social, progreso material y humano, honestidad y honradez desde el Gobierno, nos hace –ahora sí- perfilarnos para el triunfo electoral el próximo 2 de junio.
Y no hay por qué asustarse, cuando se está haciendo lo correcto…
Ahora sólo nos resta usar nuestras propias fortalezas; que es lo más valioso con lo que contamos los ciudadanos organizados: nuestra honestidad y nuestra convicción de cambio.
Debemos escuchar a nuestros corazones… reconocer que nuestra dignidad como individuos y como población, son más grandes que nuestros ‘propios miedos’…
Porque siempre las grandes hazañas de la humanidad, donde ha estado presente –por mínimo que haya sido- un riesgo de cambio, ha despertado la adrenalina de nuestros organismos… pero hay que recordar que detrás del miedo, está el éxito….. está la victoria.
¡Por un México sin miedo!… hoy más que nunca… ¡Votemos en masa este 2 de junio!… y hagámoslo orientados por el espíritu de libertad, dignidad y progreso, que sentaron las bases fundacionales de esta gran Nación que es México y que es mucho más grande que sus enemigos históricos, que la han querido ver siempre como el perpetuo Virreinato de la injusticia, que no es capaz de evolucionar hacia el progreso y la modernidad; que la han concebido como aquella “aldea caciquil” donde el individuo más histriónico y “rollero” es capaz de explotar los complejos y los traumas colectivos de la gente, para enredarla en la peor de las aventuras del mundo de la tiranía al servicio de cualquier país monopólico en turno, con el que se “dobla” de manera infame y humillante a la primera crisis que se presenta.
El exitoso desarrollo de la Marcha Concentración que convocó a un millón de ciudadanos tan sólo en la CDMX y la firme defensa de sus proyectos desprendidos del deseo genuino de preservar la vida, la paz y el progreso en nuestro país y en nuestra ciudad capital, nos dan la certeza de que las mejores opciones son Xóchitl Gálvez para la Presidencia de la República y Santiago Taboada para la capital del país, … y en general, todos los candidatos del Frente Opositor.
¡Hagamos realidad la hazaña democrática de nuestro tiempo!
Autor: Héctor Calderón Hallal
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