El estudio tiene fecha del más reciente febrero. En él se apunta que, si en aquel momento se hubiesen celebrado las elecciones federales para renovar a la Cámara de Diputados –lo que acontecerá dentro de 12 meses y días–, el partido de Enrique Peña Nieto apenas si ganaría en 80 de los 300 distritos electorales.
Los de las fronteras de plano están perdidos, tras la homologación del IVA. Los del resto del país en las mismas, por las severas medidas fiscales, también, pero sobremanera por la estanflación económica que el país y sus habitantes padecemos.
No es la primera vez que se dice, pero la gota está a punto de derramar el vaso en el tricolor. Como si no supieran en el partidazo que tienen sobre la cabeza la espada de Damocles del repudio popular, tienen abandonado todo el trabajo en las organizaciones intermedias que tradicionalmente fueron sus enlaces con los electores y sus simpatizantes.
Se observa nula actividad y demasiada frivolidad en las organizaciones agrarias, obreras y del sector popular. Y no es que no existan. Lo que pasa es que no les dan dirección.
¿Dónde están la CNG, la CNPR, la CNC, la CCI, la UGOCEM, el Consejo Agropecuario, las Federaciones Obreras de la CTM, de la CROC, de la UGT, dónde andan las ligas cenopistas, dónde están los dirigentes del PRI?
Cómo que todo el mundo ya agarró el camino de Los Pinos para vender caras sus lisonjas, ¡antes de que se ganen las canicas!
Y toda la tarea proselitista está en las manos de Rosario Robles y sus programas asistencialistas-electoreros a discreción.
En febrero ganaba el PRI 80 curules. Ahora serían mucho menos.
ADIÓS AL ESTADO NACIONAL
Y olvídense ya de Benito Juárez, Plutarco Elías Calles o Lázaro Cárdenas del Río. Los dos grandes “ideólogos” del México moderno son Eugenio Garza Sada –Tec de Monterrey– y Raúl Bailleres, creador de la Ibero y del ITAM. Parece mentira, pero hay que reconocer que estos dos capitostes no sólo destruyeron las generaciones que luchaban por el nacionalismo mexicano, sino también destruyeron la actitud y todo vestigio del Estado de bienestar.
Utilizando a Francisco Gil Díaz, gurú del monetarismo y palafrenero de los patrones yanquis e hispanos, llevaron de la mano a una turbamulta de desheredados intelectuales que, sin pasar por el reclutamiento y la formación que da el sector público, asaltaron todos los puestos financieros de mando y acabaron con la esencia del Estado mexicano, convirtiéndolo en un auténtico traspatio de un EU con más problemas que nosotros.
Una runfla de descastados que, cursando un solo “veranillo” –además en español, ni siquiera en inglés– en la universidad gringa que le indicasen, llega a conquistar a las mentalidades de acá del Rancho Grande. Con una sola condición: agachar la cabeza cuando hablen los paniaguados de Paco Gil, llámense Gurría Treviño, Aspe Armella, Ortiz Martínez o Carstens Carstens.
¿A dónde hemos llegado? ¿La batalla terminó?
CARRUSEL, TACO, SOMBRERO
Para defender la chuleta, los jóvenes tecnocratitas itamitas del SAT son capaces de inventar hasta que descubrieron el agua tibia. Nadie les creyó la especie que boletinaron con profusión digna de mejor causa, el fin de semana pasado, en el sentido de que habían descubierto “fraudes fiscales de empresarios en carrusel”. Sería que estaban soñando con algún lugar mágico de Disneylandia, que es su mito aspiracional recurrente?
Sería que quisieron revivir aquellos famosos recursos electorales del PRI llamados, “taco”, “sombrero” y “carrusel”?
No. No les da el seso para emular a Luis del Toro Calero (qepd) ni a Toño Cueto Citalán.
ENTORCHADOS FAKE O PATITO
Después de investigar a la ex jefa de prensa de la Presidencia calderónica, Alejandra Sota, y no encontrar fallas en los multimillonarios contratos que “facilitó “a sus amigos del ITAM, el sagaz Julián Olivas (del Guamúchil Party, but of course) se fue sobre la línea de usurpación de profesiones, pues presumía de una licenciatura que nunca obtuvo.
La sorpresa es que se encontró con que no había un solo documento firmado “cómo licenciada”, por lo que no procedió.
Previsores en este sentido, hay que reconocerlo, son Oscar Argüelles y su grupo íntimo que decidieron, desde un principio, deshacerse de los profesionistas titulados y prohibir que hubiera un solo documento con ese antefijo en cualquier papel de la H. Cámara de Diputados. Lo que es la buena conciencia, ¿no?
¿Y los títulos norteamericanos de Austin y Harvard de los que presumía cuando era maletero en el avión de prensa presidencial?
Índice Flamígero: Por vergüenza, sólo por vergüenza, se hubiera ahorrado la Auditoría Superior de la Federación de Juan Manuel Portal (súbdito y testaferro del inefable Paco Rojas) ese atrevido “emplazamiento” para que las autoridades capitalinas paguen 32 millones de pesos que no ejerció la constructora en la Estación Ermita de la Línea 12. Todo mundo sabe que el desfalco y los peculados variopintos ¡son de miles de millones de dólares, señor Portal! Así que deje de hacerle al canela, cumpla con su función y absténgase de ridículos y patrañas que sólo debilitan más al de por sí mermado gobierno de EPN. Saque del closet a quién deba salir. Total, sólo fueron obra de las debilidades de la condición humana.
– o sea don Paco, podrido, todo podrido…como puede estar un pais PODRIDO? ‘odido !!!!! sabio el tal tigre.