El «cono de incertidumbre» producido por el Centro Nacional de Huracanes para pronosticar la ubicación y ferocidad de una tormenta tropical se actualizará este año para incluir predicciones para áreas del interior, donde los vientos y las inundaciones son a veces más traicioneros que los daños a las costas.
El centro de huracanes con sede en Miami dijo el jueves en la plataforma de redes sociales X que la nueva herramienta de pronóstico experimental estará lista alrededor del 15 de agosto, justo antes del pico tradicional de la temporada de huracanes que comienza el 1 de junio.
«Este gráfico experimental ayudará a transmitir mejor el riesgo de viento tierra adentro, además de los peligros de viento costero», dijo el centro en la publicación.
El cono tradicional que se utiliza desde hace años generalmente muestra la trayectoria prevista de un huracán o tormenta tropical, pero se centra en el viento y las marejadas ciclónicas a lo largo de las costas, y los meteorólogos siempre advierten que no hay que centrarse únicamente en la línea central. Las fuertes lluvias y los fuertes vientos pueden ser mortales y causar importantes daños tierra adentro, como ocurrió en 2022 con el huracán Ian, cuando 149 personas murieron en Florida.
El objetivo del cono de pronóstico ampliado es garantizar que las personas que no viven a lo largo de la costa sean conscientes de los peligros que aún podrían enfrentar, dijo Jamie Rhome, subdirector del centro de huracanes. El nuevo cono presenta colores para mostrar qué lugares enfrentan amenazas de una manera mucho más amplia que antes. Si alguien vive en una de esas áreas, «está en riesgo», dijo Rhome.
Cada vez hay más evidencia de que los impactos del cambio climático, como el aumento del nivel del mar, están haciendo que los huracanes más severos sean aún más intensos y aumentando la probabilidad de que un huracán en desarrollo se intensifique rápidamente, lo que provocará más inundaciones y marejadas ciclónicas más poderosas que azotarán las costas, afirman los expertos. decir.
Después de que Ian azotó el área de Fort Myers, donde murió la mayoría de las personas y se causaron los peores daños, la tormenta siguió arrojando lluvia y derribando árboles en una amplia franja del estado. Se informaron inundaciones alrededor de Orlando y sus parques temáticos, al sur de Kissimmee, al este de Daytona Beach y en la zona ganadera y cítrica del centro de Florida.
Ian produjo entre 10 y 20 pulgadas (51 centímetros) de lluvia en gran parte del centro de Florida, informó el centro de huracanes.
Las personas cercanas a los ríos se vieron afectadas profunda y posiblemente inesperadamente. Después de que Ian atravesó el interior del condado de DeSoto y el río Peace inundó la comunidad, el jefe de bomberos Chad Jorgensen instó a los residentes a huir, diciendo que el río era impredecible y peligroso.
La primera tormenta con nombre de 2024 será Alberto. En la temporada 2023 se produjeron 20 tormentas con nombre, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, incluidos siete huracanes. Sólo el huracán Idalia azotó Estados Unidos y tocó tierra en la región poco poblada de Big Bend en la costa del Golfo de Florida, pero también provocó importantes inundaciones tierra adentro.
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